BMW Serie 7: 760i con 12 cilindros y dos tallas

BMW completa su serie 7 con el 760i, tanto en su carrocería normal como larga.

Con 12 cilindros en V el 760 es un prodigio de suavidad y potencia, no solo por sus 544 CV sino porque dispone de una cifra de par de 750 Nm a tan solo 1.500 vueltas, manteniéndose plana la línea de respuesta hasta las 5.000 rpm. trabajando en combinación con un cambio de 8 velocidades.

Tanto motor como cambio son nuevos, el primero construido en aluminio tiene 6 litros de cilindrada, con sobrealimentación a base de un turbo por cada fila de cilindros, inyección directa de gasolina y Doble-Vanos. El cambio es automático, con función secuencial.

A pesar de su enorme masa, el 760i se pone a 100 Km/h en 4,6 segundos, una cifra equiparable a la de los más caros deportivos. El consumo medio oficioso por BMW es de 12,9 l/100 Km. Esto significa una mejora del 4.5% respecto al modelo anterior, a pesar del incremento de potencia.

El nuevo BMW 760i y el nuevo BMW 760Li llevan de serie el sistema Dynamic Damping Control, que incluye el sistema Dynamic Drive Control – que se maneja con la tecla que se encuentra en la consola central – además del sistema de asistencia de la dirección en función de la velocidad Servotronic y el sistema de supresión de inclinaciones Dynamic Drive. El BMW 760Li también cuenta con una amortiguación neumática con regulación de nivel en el eje posterior. Además, ambos modelos pueden estar equipados opcionalmente con la dirección integral activa, que adapta el ángulo de giro de las ruedas posteriores en función de la velocidad. Este sistema de dirección, que actúa sobre las ruedas de los dos ejes, logra aumentar el nivel de confort para los pasajeros que ocupan los asientos posteriores, por ejemplo al cambiar de carril a altas velocidades.

Al igual que en el resto de la gama de la Serie 7, la versión larga tiene 14 cm más de longitud que se van a la batalla para aumentarlos íntegramente en las plazas traseras.