En el test de frenado, los resultados demostraron que un Mercedes-Benz C250 Estate dotado de ABS, pero con sus amortiguadores a medio uso, necesitaba una distancia de frenado en emergencia de 1,8 metros más larga que el mismo vehículo equipado con unos amortiguadores nuevos.
En un segundo test se puso a prueba el sistema ASR en una aceleración brusca. En esta prueba, el Mercedes-Benz 250 demostró una pérdida en la aceleración de un 16% si llevaba amortiguadores al 50%.
Estos resultados demuestran la importancia de vigilar el estado de los amortiguadores, sobre todo si se piensa desplazarse con él por carreteras en las que pueden aparecer el hielo o la nieve, incluso aunque el vehículo vaya equipado con los sistemas de seguridad más avanzados.
Por norma, conviene revisar el estado de los amortiguadores cada 20.000 Km.
En un segundo test se puso a prueba el sistema ASR en una aceleración brusca. En esta prueba, el Mercedes-Benz 250 demostró una pérdida en la aceleración de un 16% si llevaba amortiguadores al 50%.
Estos resultados demuestran la importancia de vigilar el estado de los amortiguadores, sobre todo si se piensa desplazarse con él por carreteras en las que pueden aparecer el hielo o la nieve, incluso aunque el vehículo vaya equipado con los sistemas de seguridad más avanzados.
Por norma, conviene revisar el estado de los amortiguadores cada 20.000 Km.