Algunos estudios constatan su peligrosidad en un uso inadecuado puede llegar a ser tan peligroso como la conducción con exceso de alcohol.
Un alto porcentaje de conductores (entre un 30% y un 50%) no percibe este riesgo, por lo que es necesaria la sensibilización en varias direcciones:
- Disuadir a los usuarios de llamar o coger el móvil mientras conduce.
- Desistir de realizar una llamada a quién se sabe que puede ir conduciendo.
- Comprender que como peatones, abstraídos en la conversación, también caminamos ajenos a los riesgos viales.
Cada vez existe más información sobre la relación entre el uso de teléfonos móviles y la conducción. Un estudio epidemiológico realizado en Toronto (Canadá) con 700 conductores que habían estado involucrados en accidentes de tráfico concluye que:
- El riesgo de accidente cuando se usa teléfono móvil es cuatro veces mayor que si no se utiliza.
- El riesgo relativo de sufrir un accidente mientras se usa el teléfono móvil en algunos casos puede llegar a ser equiparable al de conducir con una tasa de alcohol en sangre de 1 gr./l.
UN RIESGO ASUMIDO
Los conductores saben que conducir y hablar por el móvil a la vez supone un riesgo importante y reconocen abiertamente que lo utilizan. Según un estudio reciente de la DGT, más de un 30% de los conductores confesaba esta práctica. Y en 6 de cada 10 casos, el aparato utilizado era manual, el más peligroso. Sólo un 14% era ?manos libres?.
Las conclusiones de dicho estudio resultan preocupantes: 5 de cada 10 conductores reconoce haber usado el móvil por lo menos una vez a lo largo del trayecto para hacer o recibir una llamada. Otras fuentes de investigación coinciden en los datos y señalan, en números absolutos y como media, que más de 3.300.000 conductores usa el móvil mientras conduce.
Sin embargo, los conductores son conscientes del riesgo que asumen con esta práctica, hasta el punto de que el 10% dice haber sufrido algún percance. Marcar un número, según los encuestados, es lo más peligroso y puntúan con una nota de 8,2 sobre 10 el riesgo que, en general, el móvil añade a la conducción.
DISTRACCION FATAL
El momento de mayor peligro es, según los expertos, cuando se recibe una llamada. La misma sorpresa que produce el sonido se traduce en una aceleración del ritmo cardiaco del conductor y el cerebro, desde ese momento, tiene que dividir su atención entre el desarrollo de la conversación y las circunstancias del tráfico.
En mayor o menor medida y en función del contenido de la conversación, la tarea de conducir es la que sale perjudicada de esta dualidad. Mientras habla y conduce, el conductor pierde la capacidad de mantener una velocidad constante, de guardar la distancia de seguridad suficiente con el vehículo que circula delante y su tiempo de reacción aumenta considerablemente: entre medio a dos segundos, según los reflejos de cada uno. En este tiempo, que parece mínimo, se recorren entre 23 y 70 metros a 120 km/h lo que, evidentemente, es distancia más que suficiente para sufrir un accidente.
El nivel de distracción que sufre el conductor en algunas llamadas es equivalente a haber ingerido alcohol, hasta el punto de que el 40% de las señales le pueden pasar desapercibidas. Tampoco es menos peligroso hacer una llamada en la que, para marcar un número, la vista se desvía de la carretera y la mano del volante.
CONSEJOS PARA GUARDAR
. Móvil sin manos libre. Desconéctelo mientras conduce. Es lo más seguro. Nada puede ser tan urgente que compense el riesgo de sufrir un accidente, ya que incluso la sorpresa de oírlo sonar al entrar una llamada puede suponer algo más que un susto.
. Manos libres. Los teléfonos ?manos libres? (los únicos permitidos), son menos peligrosos que los otros, aunque no disminuyen el resto de los efectos de riesgo: distracción, señales que no se ven, mayor tiempo de reacción, maniobras sin señalizar ...
. Contrarreloj. Pasados los dos primeros minutos, el conductor aleja su atención de la carretera y la pone en la conversación que está teniendo. Si, encima, lo que le llegan son malas noticias, a la falta de atención se sumará un grado importante de tensión.
. No sólo al volante. El peligro de distracción también afecta a los peatones, que pierden la noción del riesgo cuando caminan hablando por teléfono: cruzan sin mirar, bajan a la calzada de repente, ....Si habla, párese.
. Mire a quién llama. Todos somos responsables. Antes de llamar a un móvil piense si el destinatario va conduciendo. En caso afirmativo no llame.
. Usar el móvil mientras se conduce es un grave riesgo. Sin embargo, llevarlo en el vehículo será de gran utilidad en caso de emergencia.
PARA LA REFLEXIÓN
El accidente.- Una llamada de móvil en la cabina de un camión pudo ser el desencadenante de un trágico accidente en el que veintiocho personas perdieron la vida, cuando un camión que transportaba ganado chocó violentamente contra un autobús que circulaba en sentido contrario.
Conmoción social.- El impacto social que produjo el accidente y sus dramáticas consecuencias, motivó una exhaustiva investigación posterior. Los investigadores descubrieron que en la calzada no había huellas de frenada, ni los tacógrafos reflejaban exceso de velocidad en ninguno de los vehículos ni las condiciones meteorológicas eran adversas. Además, la visibilidad de la carretera era buena, el pavimento estaba seco y la señalización era correcta.
Conclusiones de los expertos.- Ante esos datos, los investigadores atribuyeron el siniestro a la distracción del conductor del camión por una llamada telefónica, que fue contestada por su acompañante y en la que prácticamente no dio tiempo a conversación alguna. La hipótesis más probable es que un despiste de apenas 2 segundos, (en los que se recorren 44 metros a 80km/h) llevara al conductor a continuar recto en lugar de seguir la trayectoria de la carretera, con una curva amplia que empezaba en ese momento.
LO QUE DICE LA NORMATIVA - Real Decreto 1428/2003, de 21 de noviembre, por el que se aprueba el Reglamento General de Circulación para la aplicación y desarrollo del Texto Articulado de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial. Art. 18.2: “…Se prohíbe la utilización durante la conducción de dispositivos de telefonía móvil y cualquier otro medio o sistema de comunicación, excepto cuando el desarrollo de la comunicación tenga lugar sin emplear las manos ni usar cascos, auriculares o instrumentos similares”. - Real Decreto Legislativo 339/1990, de 2 de marzo, por el que se aprueba el Texto Articulado de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial. Este tipo de infracción está tipificada como leve y por lo tanto la sanción que corresponde es: Art. 67: “…Las infracciones leves serán sancionadas con multa de hasta 91 €…” |
Fuente: DGT