Los fallos humanos son la principal causa de accidentes. La falta de reflejos, los despistes en la conducción pueden más que un buen sistema de frenado, cuando de parar el vehículo se trata. Por eso, los constructores de vehículos piden a los fabricantes de componentes que desarrollen nuevos dispositivos para corregir la conducta humana.
Apoyos al ABS:
El sistema antibloqueo de frenos ha representado un importantísimo apoyo a la seguridad vial. En el año 2.000 dos tercios de los vehículos de nueva matriculación lo llevarán y, a partir de ese momento, también nos iremos acostumbrando a otras siglas, ESP (programa de estabilidad electrónica). Los ESP trabajan en colaboración con el ABS, vigilando la presión del conductor sobre el pedal de freno y corrigiéndola si no es la adecuada. Es decir, el coche puede frenar sin que el conductor intervenga.
Mantenimiento de la distancia entre vehículos:
Vaya memorizando unas nuevas siglas: ACC. Dan nombre a un nuevo dispositivo de regulación de velocidad de crucero dotado de un sensor de rádar que mide constantemente la distancia que nos separa del vehículo que nos precede. Si dicha distancia es inferior a un límite específico (calculado en función de la velocidad) el sistema frena automáticamente y lo hace de un modo tan suave que los ocupantes del vehículo apenas lo perciben.
Un botón como freno de mano:
En los próximos años, veremos sustituir la palanca de freno de mano por un simple botón. Se acabarán los problemas para salir de una cuesta empinada, por muy pronunciada que resulte.
Apoyos al ABS:
El sistema antibloqueo de frenos ha representado un importantísimo apoyo a la seguridad vial. En el año 2.000 dos tercios de los vehículos de nueva matriculación lo llevarán y, a partir de ese momento, también nos iremos acostumbrando a otras siglas, ESP (programa de estabilidad electrónica). Los ESP trabajan en colaboración con el ABS, vigilando la presión del conductor sobre el pedal de freno y corrigiéndola si no es la adecuada. Es decir, el coche puede frenar sin que el conductor intervenga.
Mantenimiento de la distancia entre vehículos:
Vaya memorizando unas nuevas siglas: ACC. Dan nombre a un nuevo dispositivo de regulación de velocidad de crucero dotado de un sensor de rádar que mide constantemente la distancia que nos separa del vehículo que nos precede. Si dicha distancia es inferior a un límite específico (calculado en función de la velocidad) el sistema frena automáticamente y lo hace de un modo tan suave que los ocupantes del vehículo apenas lo perciben.
Un botón como freno de mano:
En los próximos años, veremos sustituir la palanca de freno de mano por un simple botón. Se acabarán los problemas para salir de una cuesta empinada, por muy pronunciada que resulte.
