Al igual que ocurrió hace 50 años con el neumático radial, Michelin vuelve a realizar una apuesta fuerte por una nueva tecnología que supone una ruptura con la tecnología anterior. En este caso, esta ruptura implica no sólo a los fabricantes de neumáticos, sino también a los productores de llantas, de equipamiento y a los propios servicios de neumáticos, que tendrán que adaptar sus negocios (tanto a nivel de equipamiento como de formación) para poder comercializar este nuevo tipo de neumático si, como pretende Michelin, se convierte en el neumático estándar del tercer milenio.
Según el departamento de desarrollo de Michelin, mejorar de manera global y significativa, sin romper con las tecnologías existentes es una quimera, por lo que Michelin debía ir más allá y crear un nuevo estándar.
El nuevo sistema de enganche neumático/llanta anti-desllantable es un concepto radicalmente nuevo que se adapta a todo tipo de vehículos y permite que el conjunto de las prestaciones del neumático alcance un nivel inigualado.
La transición
Los
neumáticos de diseño tradicional están compuestos
por una zona baja que sirve para garantizar
la unión mecánica del neumático con la llanta
bajo la acción de la presión de inflado.
Esta zona consta de un talón cuya función es pegar el neumático a la llanta por efecto de la presión, y una zona de transición cuyo papel es garantizar el paso progresivo de una zona de alta flexibilidad (el flanco) a una rigidez extrema (el talón). Durante el rodaje, las deformaciones de la zona de transición provocan importantes pérdidas de energía y alteran el trabajo del flanco, especialmente sometido a un esfuerzo lateral. La "solución", adoptada en el Pax System, ha consistido en disociar completamente el funcionamiento del flanco y del enganche, suprimiendo la zona de transición.
El Pax se caracteriza por una forma nueva y compacta de enganche que bloquea automáticamente el neumático en la llanta Este nuevo diseño permite eliminar la zona de transición y mejora las prestaciones de los flancos, más cortos y resistentes.
Pax System
El Pax System está compuesto por cuatro elementos: un neumático anti-desllantable, una llanta especial, un apoyo o soporte de elastómero inyectado y un detector de rodaje con neumático desinflado (LESA: Lectura Electrónica de Señal de Apoyo, sistema electrónico que están desarrollando conjuntamente Michelin, Renault y Valeo).
Sin
embargo, la verdadera novedad se encuentra
en el enganche de neumático y llanta. En el
caso del enganche de un neumático tradicional
en la llanta, las fuerzas de presión se aplican
del interior del neumático hacia el exterior
y "pegan" el neumático contra
el borde de la llanta. Cuando la presión disminuye
bruscamente, el talón del neumático puede
separarse del borde de la llanta por efecto
de un esfuerzo.
El concepto de enganche del Pax System se basa en el bloqueo mecánico en el que cualquier esfuerzo ejercido sobre el neumático se traduce en una tensión dentro de la carcasa que refuerza este bloqueo, incluso sin presión.
La presión de inflado o cualquier esfuerzo exterior ejercido sobre el neumático tira de la carcasa: el aro, que es inextensible, no puede desplazarse más que hacia el exterior de la llanta.
De este modo, la goma situada en el extremo del sistema de enganche se comprime en el fondo de la garganta y bloquea el conjunto.
Ventajas
La adopción del Pax System significará, según los ingenieros de desarrollo de Michelin, la incorporación de nuevas prestaciones tanto en el vehículo como en el neumático.
El Pax System permite, gracias a su arquitectura general optimizada y a unos flancos más cortos, una mejora en la conducción y y máxima precisión de guiado del vehículo, lo que redundará en una mayor seguridad, adherencia y estabilidad en curva.
Asimismo, al eliminar la zona de transición entre el flanco y el enganche con la llanta, la resistencia al rodamiento del Pax se ha reducido considerablemente, hasta un 10 por 100 en relación a los neumáticos actuales.
Evidentemente, el diseño antidesllantable del Pax System aumenta la seguridad activa del vehículo asegurando el control en cualquier circunstancia, incluso en caso de pérdida brusca de presión, garantizando además la no inmovilización por un simple pinchazo y la elección del lugar y el momento de la reparación.
En
caso de pinchazo, el neumático se coloca sobre
el soporte interior, gracias al cual puede
recorrer sin
presión una distancia de hasta 200 km a una
velocidad de 80 km/h. Esta posibilidad exige
la presencia de un sistema de detección que
avise al conductor de que está rodando en
condiciones anómalas y que debe adaptar su
manera de conducir a dichas condiciones. Para
el Pax System, Michelin ha desarrollado el
LESA. Por su forma, el sensor colocado en
el soporte emite una señal en el momento en
que el neumático está desinflado. Esta señal
se transmite a un receptor, colocado en el
chasis del vehículo, que procesa la información
y la transmite al salpicadero, avisando al
conductor de que uno de los neumáticos rueda
sobre el soporte.
Fabricantes
Gracias a sus características originales, el Pax System permite a los equipos de diseño de los constructores de automóviles explorar nuevas soluciones para diseñar los vehículos del futuro.
Con
la misma capacidad de carga y velocidad que
un neumático convencional, e idéntico
diámetro de llanta, el Pax System se caracteriza
por tener un menor volumen exterior. Esta
ganancia de espacio ofrece más habitabilidad
para los pasajeros o más espacio para el equipaje.
Como gran ventaja para los constructores, el Pax permite la eliminación de la rueda de repuesto, lo que posibilita aumentar el espacio útil en el habitáculo; y también montar diferentes medidas en el eje delantero y en el eje trasero.
La estructura del Pax System, con la cual se reduce el volumen que ocupa el neumático manteniendo la misma capacidad de carga y velocidad, también posibilita ofrecer mayor espacio para los sistemas de frenos con un volumen exterior muy similar.