El dibujo, además de aportar una cierta apariencia distintiva al neumático (es su cara, por llamarlo de alguna manera), cumple también el cometido de transmitir todas las fuerzas ejercidas por el vehículo al suelo (son la suela de los zapatos).
El dibujo es necesario debido a que el neumático se utiliza con climatología cambiante. Para rodar en seco lo mejor son los neumáticos sin dibujo o "slick", que disponen de la máxima superficie de agarre. Sin embargo, estas cubiertas son incapaces de evacuar ni una gota de agua. Por eso, los neumáticos deben llevar ranuras que permitan la expulsión del agua de debajo del mismo, evitando el llamado fenómeno del aquaplaning: el neumático se sube encima de una ola de agua formada frente a él, perdiendo todas sus propiedades de agarre y direccionalidad. La combinación de estas ranuras forman los tacos, que son finalmente los que entran en contacto con la calzada.
Tipos de dibujo
Existen diferentes tipos de dibujo según la disposición de sus tacos. El direccional (véase neumático superior) es aquel que confiere al neumático un sentido de giro determinado. Va montado en una posición concreta. Algo similar sucede con los dibujos asimétricos (véase neumático inferior), aquellos en los que los tacos son diferentes en cada lado del neumático, confiriendo cada parte agarre en determinadas circunstancias (recta, curva, frenada, etc), y mejorando la evacuación de agua en neumáticos muy anchos. También tienen el inconveniente de un montaje especial, dependiendo de si van montados en el lado izquierdo o derecho del vehículo. Existen también neumáticos mixtos, es decir, direccionales + asimétricos, que combinan las propiedades de ambos. Por último, están los dibujos estándar, en los que los tacos no tienen una disposición especial.
En general, todos los neumáticos presentan una combinación de ranuras longitudinales (para evacuar el agua del centro del neumático) y transversales (para evacuar el agua por los lados).
El dibujo es necesario debido a que el neumático se utiliza con climatología cambiante. Para rodar en seco lo mejor son los neumáticos sin dibujo o "slick", que disponen de la máxima superficie de agarre. Sin embargo, estas cubiertas son incapaces de evacuar ni una gota de agua. Por eso, los neumáticos deben llevar ranuras que permitan la expulsión del agua de debajo del mismo, evitando el llamado fenómeno del aquaplaning: el neumático se sube encima de una ola de agua formada frente a él, perdiendo todas sus propiedades de agarre y direccionalidad. La combinación de estas ranuras forman los tacos, que son finalmente los que entran en contacto con la calzada.
Tipos de dibujo

En general, todos los neumáticos presentan una combinación de ranuras longitudinales (para evacuar el agua del centro del neumático) y transversales (para evacuar el agua por los lados).