Texto: Eugenio Pinilla 09/07/2011. Fotografías Com&Com.
Publicado julio 2011
Rf: Motor:Volvo. Tipo: D5204T6
El V40 asocia la V de los familiares de Volvo al 40 que es decena par para sus berlinas. No quiere categorizarlo como un familiar y la verdad es que tienen sus razones ya que la luneta trasera está muy inclinada y puede parecer un 5 puertas más clásico con un voladizo trasero más bien corto.
Sea como sea, estamos ante un coche que viene a repetir el diseño del V60 pero en una talla menos, con una buena ristra de motores en la que el D3 es el mediano por aquello de saber dónde anda la virtud.
Motor de 5 cilindros y 2 litros.
150 CV diésel en un motor de 5 cilindros que aporta suavidad en una cilindrada de 2 litros y que su mejor cualidad es que es muy elástico, dando enseguida la potencia y sin perder brillantez incluso por encima del régimen de potencia máxima que es a tan sólo de 3.500 rpm.
Al contrario de lo que puede parecer, es un motor que tiene una zona de uso amplia y que aguanta las marchas casi como un gasolina, es muy fácil llegar al corte de inyección y es por lo bien que sube de vueltas.
Interior nuevo y moderno.
Dentro del V40 vemos la consola plana como en el S40, pero lo demás es nuevo, con la misma calidad y una ergonomía bastante buena. Sobresaliente la instrumentación, a base de pantallas a modo de relojes que se pueden configurar de diferentes modos. Más deportivo, más discreto o económico.
La zona de carga esta cuidada, con buenos detalles, abatimientos fáciles y un volumen en su proporción.
Dinámicamente los 150 CV mueven con soltura sus algo más de 1.500 Kg, con unas prestaciones notables, sobre todo con no mucha carga, y no pierde los modales así como así. La entrada en curvas es muy buena, se pueden buscar los límites con cierta facilidad porque da confianza, apoyos firmes, paso en curva alto y unos frenos que cuesta hacerlos desfallecer.
Estupenda relación de prestaciones/consumos.
A poco que cuides la conducción, este V40 D3 te premia en la gasolinera, con consumos más que buenos. Incluso en curvas mantiene buen nivel.
En la urbe se muestra manejable, con sistema de calado automático los consumos no se resienten en el tráfico más lento, y se puede hablar de unos consumos entre 6 y 7 litros en casi todos los terrenos, como la media de nuestra prueba de 6,4 litros.