Texto: Eugenio Pinilla 19/11/2011. Fotografías Com&Com.
Publicado noviembre 2011
Rf motor: Volkswagen Tipo: (D) CFF
La nueva generación del Jetta está disponible desde el verano de 2010, fue una actualización en la que se prescindió de cualquier pieza de carrocería del Golf, con ello se marca una independencia total con el polivalente de la marca alemana, pero también lo acerca a su Berlina media.
Y es que es 9 cm más largo que la generación anterior, y dispone ahora de unas plazas traseras que son incluso mejores que las del Passat de la generación anterior.
Además la gama de motores llega hasta los 200 CV lo que puede hacer saltar más de una venta del Passat al Jetta.
Plazas traseras mejoradas
En el cambio de generación una de las cosas que más han salido ganando ha sido el espacio de las plazas traseras. Con 9 cm más de batalla, hay más cota útil y por lo tanto más espacio para las piernas, siendo ya las plazas traseras muy buenas para adultos.
Aquí atrás se sigue contando con salidas salidas de aireación regulables en la consolita inferior, con reposacodos central que incluye 2 posavasos y con hueco para comunicar el maletero, pero de un acabado un poco tosco, ya que una vez abierto la tapa cae al hueco del maletero haciendo complicado su cierre.
El maletero es más pequeño
Que no cunda el pánico, no es que se haya perdido los tremendos 527 litros del maletero del Jetta anterior no. Es que se ha dado más importancia al habitáculo porque precisamente ya de maletero está sobrado y tan solo se ha prescindido de 17 litros.
Lo que es más preocupante es que se ha dado un paso a trás en el acabado de las visagras. Antes eran tipo fuelle que no estorbaban en el interior y ahora son dos visagras de las que se comen carga, o golpean el equipaje cuando está a tope de carga.
Conducción, consumos y prestaciones, un gran argumeno de compra
Lo comentado hasta ahora eran cosas relacionadas con el propio Jetta como berlina, pero centrándonos en el capítulo de la dinámica, el Jetta cuenta como buen Volkswagen con una buena gama de motores a elegir y el 2.0 TDI de 140 CV una de las más seductoras opciones, sobre todo con cambio DSG.
Este motor de nuestra unidad, es uno de los más populares en el grupo VAG, y que ya lleva tiempo usando la tecnología de raíl comun. Dispone de 140 CV, que parecen más, tenemos una estupenda disposición de potencia, con un generoso par de 320 Nm entre 1.750 y 2.500 vueltas, el espectro de uso para una conducción suave y tirando de bajos, con ello tenemos una respuesta contundente pero suave y con los mejores consumos posibles.
El cambio DSG ayuda a hacer aún más confortable la conducción y con unos consumos muy similares. Cuenta con levas de cambio de serie en el volante, y un interface de uso en la palanca bastante intuitivo en el que podemos optar por una conducción tradicional en automático, bien con preferencia a los consumos en ls "D" o a las prestaciones en la "S", que ahora en las últimas generaciones de DSG es más notable el régimen alto al que se mantiene, y que permite ir perfectamente en curvas en esta posición automática "D". En cualquiera de estas dos posiciones si tocamos las levas reducimos siempre y el coche vuelve a su lógica automática tras unos segundos de no mover las marchas. No obstante podemos siemple volver intencionadamente a la posición automática pulsando una leva un par de sgundos.
La guía secuencial viene a "obligarnos" a cambiar de marcha a nosotros, pero siempre nos corregirá los sobre-regímenes o al reves, se autoreduce si la solicitud del acelerador es a tope y hay margen para reducir y salir con más brío.
Si elegimos la versión "Sport" nos encontraremos con una amortiguación más rígida para los amantes de las curvas. El confort no se ve comprometido en absoluto y nos permite un ritmo vivo, que nos hace recordar al Golf en su inspiración deportiva, pero nada más. El DSG ahora permite unas reducciones algo más exigentes y esta berlina aparentemente aburguesada se convierte con una o dos personas a bordo en un divertido coche en las curvas.