Texto: Equipo de pruebas 09/02/2013. Fotografías Com&Com.
Publicado Febrero 2013
Rf motor: PEUGEOT Tipo: G-3PT
Un motor muy conseguido
Parece mentira lo que están evolucionando los motores de tres cilindros en esta última época. De estar relegados a coches pequeños y ser ruidosos y "ásperos" hemos pasado a verlos ya incluso en compactos y con un funcionamiento muy bueno.
En el caso que nos ocupa estamos ante el motor gasolina de tres cilindros con más cubicaje del mercado. Es un motor muy suave y silencioso en marcha que tiene un tacto excelente, y tanto es así que parece que llevemos un buen motor de cuatro cilindros bajo el capó en vez de un motor con un cilindro "capado".
En cuanto a prestaciones no puede con el 1.6 HDi de 92 CV, como es lógico, pero en lo que lo gana con claridad es en placer de conducir por lo suave y sedoso que se muestra el motor.
Da la cara
Quien piense que este motor va a hacer ir arrastrándose al 208 está equivocado. Es cierto que los 82 CV son los que son pero el coche no se muestra perezoso. Comparativamente es un motor que acelera mejor que recupera y hasta 3.000 rpm tiene un "tironcillo" que hace que parezca que lleva un pequeño turbo por la rapidez y alegría con la que responde.
Acompañando al motor llevamos una caja de cambios de cinco velocidades con unos desarrollos tirando a cortos que ayudan bastante a mover el coche con más salero del esperado y no perjudican los consumos, aunque en cuanto lleguemos a 5.200 rpm conviene subir de marcha. Esto nos ha sorprendido, pues los motores tricilíndricos son muy propensos a llegar al corte de inyección con más facilidad que los tradicionales de cuatro cilindros.
Lo que menos nos ha gustado, y no sabemos por qué es así, es que le cuesta salir desde parado. O aceleramos por encima de 2.500 rpm para emprender la marcha o veremos como el coche se muere.
Mucha tecnología
Este motor, junto al 1.0 VTi de 68 CV, han nacido con el propósito de jubilar al veterano motor 1.4 de 75 CV. Frente a este último se ha reducido el peso en 21 kilos y las emisiones de CO2 en un 25%, con lo que ello supone en reducción de consumo y mejora de prestaciones y emisiones.
Para consumir menos se ha reducido la fricción de las piezas del motor en un 30% gracias un revestimiento especial de dichas piezas, al empleo de una correa de distribución húmeda y al descentrado de los pistones.
También la combustión se ha optimizado mediante la mejora de la aerodinámica de las cámaras y a la adaptación del encendido a un funcionamiento con un fuerte porcentaje de gases residuales.
La culata del motor está realizada en aleación de aluminio y cuenta con 4 válvulas por cilindro, incorporando inyección indirecta multipunto y distribución continua variable tanto en admisión como en escape.
Actualmente no dispone de sistema Start&Stop pero en desarrollos futuros de este motor ya se contempla el uso de inyección directa y sobrealimentación.