Mazda Mazda2 1.4 CRTD Sportive (Descatalogado): Estilo propio

Texto: Eugenio Pinilla 24/05/2006 Fotografías Rubén D. Chaves. Publicado marzo 2007

Pensado para la urbe

La gama del Mazda 2 es justa, definida con dos niveles de acabado en consonancia a los motores, 3 de gasolina, entre 1.2 y 1.6 CC y nuestro diesel que se puede disponer en los dos acabados Active y el más completo Sportive.

Curiosamente, con 68 CV, nuestra versión siendo la Sportive es la más cara de la gama, y hay que tener claro que no es el más potente si el más equipado y también el motor más económico.

Pequeño pero admite buena carga

Su tamaño es de poco menos de 4 metros y está pensado para 5 plazas. Las 3 de atrás son casi 2 + 1 de compromiso por lo estrecho de su interior, el espacio a lo alto es bueno, el techo se prolonga hasta atrás del todo y además de dar más espacio para la carga cuando lo pongamos a tope, da un espacio y desagobio para las cabezas. El maletero es de casi 300 litros, no está mal para el tamaño de coche, los asientos de atrás se abaten con banqueta incluida en 2/3, pero el suelo está lejos de ser plano. La bandeja de ocultación es enrollable y se puede colocar por algún hueco lateral.

Los dos adultos que pueden ir detrás pueden ser bien corpulentos, pero la tercera plaza será mejor para una persona menuda o un niño.

Interior agradable y bien equipado

Delante sigue con la estrecha cota de anchura, es un coche bien rematado, con detalles en su interior, en el que sólo se echa de menos alguna luz indirecta. Bien de huecos, con una guantera no muy grande y sin llave. Asientos con una buena sujeción sin ser grandes banquetas, son de una concepción algo alta, como si se tratara de un mini monovolumen, esto da ese buen espacio para piernas, aunque atrás los respaldos se quedan cortos y hay que subir los reposacabezas obligatoriamente para no apoyar la espala en ellos.

En cuanto al equipamiento hablamos de la versión más completa y en la que ya se incluye de casi todo. Añadiendo retrovisores eléctricos y calefactables, llantas de aleación, faros anti niebla, un equipo de sonido más completo con CD frontal, añade los airbags laterales a los frontales y en opción tenemos control de estabilidad. De serie en toda la gama encontramos mandos de sonido en volante, sistema de frenado de emergencia y aire acondicionado.

Cómodo de conducir, con limitaciones en carretera

Conducir este Mazda es algo muy fácil, con buenos cristales y un tamaño reducido, cualquiera fácilmente puede hacer maniobras por la ciudad. Tenemos un apoyo del pié izquierdo pequeño y bajo, mientras que el volante se regula en altura pero no en distancia como rezan los papeles.

La instrumentación es compartida con Ford (Fusion), así como algunos Mandos, el volante es de corte deportivo con piel y dos tonos y cuenta con mandos de radio incorporados.

En carretera ya es un coche más limitado, primero por su motor de tan solo 68 CV, a pesar del turbo, hay que esperar un poco para tener algo de potencia disponible. Nunca tendremos problemas con la caballería que nos permite un andar ligero sin espectacularidades, y menos si la carga es grande.

5 velocidades, todas de uso para un cambio que agradece atenderlo, tenemos que superar las 2000 vueltas para encontrarnos que por encima de 4.000 ya se acaba.

Confortable en carretera, y ligero para una conducción más deportiva.

Su amortiguación está tarada con pretensiones de confort, la carrocería se inclina un poco acentuándose con la carga, pero no hay nada que objetar a su comportamiento con una o dos personas en una conducción deportiva.

Prestacionalmente no podemos esperar mucho, con una punta de 160 km/h lo suyo es rodar no por encima de 125/130 para reservar la potencia correcta y ser atentos con el cambio. Las recuperaciones tiene su mejor momento por encima de 2.000 rpm, y en cuanto a aceleración pues es discreta en vacío.

Los consumos mejor que las prestaciones

Lo mejor sin duda son sus consumos, además de estar en una línea austera, es que es imposible estropearlos, por mucho que aumentemos el ritmo podemos hacer un par de litro más a los cien, y estamos hablando de 7 litros en las peores condiciones, que lo normal será estar entre 5 y 6 litros cada 100 km.

Resumen

En resumidas cuentas quien le guste un coche equipado, para hacer mucha ciudad con 5 puertas, de acceso fácil y poder cargar de vez en cuando este Mazda tiene su baza, en carretera tiene algo de limitación en sus prestaciones, pero se defiende bien para algún viaje que otro.