Texto: Equipo de pruebas 04/02/2013. Fotografías Com&Com.
Publicado Febrero 2013
¿Qué puede tener de especial un Picanto? Pues muy sencillo: el Picanto de nuestra prueba es una unidad única en España. Lo que hace especial a nuestro Picanto es una serie de accesorios exteriores de posventa que otorgan una imagen deportiva que no tienen sus hermanos.
Empezamos por la rejilla frontal que tiene un ribete rojo que la rodea y que recuerda mucho al estilo de la que se emplea en el Golf GTI, dando así un toque deportivo. El siguiente elemento especial son las llantas de aleación, de diseño tamibén deportivo y en acabado cromado, como cromadas son también las manetas de las puertas.
Si nos fijamos en la parte trasera nos topamos con la que quizá sea la parte más deportiva del coche. En este caso son dos los elementos de posventa que tenemos; el primero de ellos es la moldura negra que recorre de lado a lado la parte inferior del paragolpes, bastante al estilo de las versiones FR de Seat. Quizá el detalle más llamativo de nuestro coche sea su escape, y es que resulta muy chocante encontrar un Picanto con una salida doble de escape que encima cuenta con un sonido con un tono deportivo que no esperábamos encontrar en un Kia, y mucho menos en un Picanto.
¿Te gusta lo que ves? Tenemos malas noticias para ti. Todos estos accesorios que monta nuestro Picanto no están disponibles en los concesionarios de la marca en España, al menos por ahora. Como ves no te engañábamos: es un Picanto muy especial...de hecho es único en España.
Más deportivo
Aparte de que una carrocería de tres puertas siempre tiene más tintes deportivos que una de cinco, en el Picanto se complementa este carácter con varios detalles.
La silueta es algo más agresiva y se emplean unos paragolpes de diseño más sugerente, además de una rejilla delantera que también apuesta por ese toque "picante".
Pequeño por fuera, grande por dentro
Metidos dentro del Picanto da la sensación de ir más bien en un utilitario que en un coche de su tamaño. Sólo hay que echar un vistazo a nuestras mediciones para ver que algunas cifras corresponden incluso a compactos.
Delante se disfruta de 102 cm. de altura y detrás 88 cm, algo que podemos intuir simplemente mirando desde fuera la carrocería del coche. Pero quizá la cifra que más destaque es la de cota útil con 164 cm, cifra digna de un coche de más de 4,20 metros de largo.
En cuanto a calidad de materiales no esperemos gran cosa. Son plásticos duros pero muy bien ajustados, como es norma de la casa, pero con el material que tendremos que tener precaución es con el de los asientos si dejamos el coche expuesto al sol. La tapicería de los asientos está hecha de un material sintético que retiene mucho el calor si dejamos el Picanto mucho tiempo expuesto al sol y podemos llegar a "quemarnos" si vamos con unos pantalones cortos, por ejemplo. Quizá esa "propiedad" se agradezca en días fríos pero en verano está claro que no.
Ya que hablamos de los asientos nos han gustado mucho los delanteros por el buen agarre lateral. En los traseros podemos llevar a tres personas pero irán muy apretados por lo que se refiere a anchura, con lo que recomendamos que atrás viajen sólo dos adultos o tres niños.
A nivel de huecos delante vamos bien servidos a pesar de que la guantera no tiene llave, contando con un hueco bastante grande delante de la palanca de cambios y con dos posavasos rectráctiles en esa misma zona. Detrás los pasajeros están poco cuidados por tener sólo un pequeño hueco para dejar objetos las puertas y por no tener posavasos.
Más potencia con menos consumo
Tras haber probado el motor 1.0 y nuestro 1.2 sólo podemos recomendar el primero simplemente por ser más económico en el precio de compra. El motor 1.2 de 85 CV supera en todo al 1.0, incluso en consumos, llegando a haber consumido 0,6 litros menos en nuestra prueba.
Hay un mundo en prestaciones y en sensaciones al volante, sin que esto quiera decir que el motor tricilíndrico sea malo, y en uso habitual del coche se agradece el cilindro de más y los caballos extra que aporta el motor 1.2. Debido a su baja cilindrada y ausencia de alimentación lo mejor del motor llega a partir de 3.500 rpm., subiendo a partir de ahí de forma bastante lineal hasta el corte.