Texto: Eugenio Pinilla 22/03/2006.
Fotografías Rubén D. Chaves.
Publicado abril 2007
4 grandes cilindros en línea
Nuestra unidad conjuga el acabado más alto “Limited” con el cambio automático, siendo así la versión más alta de precio, exactamente a fecha de hoy 36.650 €. Sus 2800 CC se reparten en 4 grandes cilindros, situados en línea de forma longitudinal, la potencia máxima de 163 CV está a 4.000 rpm y su par máximo aparece a tan sólo 1800 rpm con la respetable cifra de 400 Nm. Retorno a los orígenes La carrocería del Cherokee 2006 es monocasco, en su enésima versión, recupera los faros redondos de los primeros diseños, después llegaría el Gran Cherokee, cuando el mercado pedía además de un todo terreno, un coche más capaz y familiar. Pero el Cherokee sigue con sus dos tallas, esta “pequeña” - que ya supera las 2 toneladas - para los que quieren más capacidad TT. Aunque tampoco se renuncia demasiado a espacio, pues este Cherokee ya tiene su buen tamaño, 4 metros y medio. Mantiene eso si un diseño de carrocería más cuadradota, menos aerodinámico y que configura un buen interior, con un salpicadero sencillo, pero muy válido, con un acabado lleno de detalles, y un nivel de equipamiento alto. Bajos irregulares Los ángulos TT son muy generosos, pero en la práctica los bajos no son nada planos, con muchos elementos sobresalientes que te limitan la conducción por trialeras de consideración. Si bien es alto, es fácil tocar con esas piezas, en general de la suspensión y el chasis. El eje trasero es rígido y el basculamiento de las ruedas traseras implica un cambio de ángulo menos efectivo. Su sistema de tracción permite circular con tan sólo la trasera o total, y después con el grupo reductor si las cosas se ponen ya muy difíciles. En general con la tracción trasera, podemos ya adentrarnos en pistas y todo terreno relativamente escarpado sin problemas, si bien la inserción de las 4 ruedas motrices siempre es recomendable en cuanto pisemos terreno blando o no asfaltado. Y también por supuesto en lluvia. Manejable en todos los terrenos La inserción de la tracción delantera, además de la trasera, se hace con toda facilidad con una palanca, algo alejada de la posición de conducción, y se puede hacer en movimiento. Esta tracción total ya implica un diferencial central de reparto a los ejes y que se hace notar en la más mínima maniobra, en marcha, mientras el suelo esté en condiciones perfectas pasa más desapercibido, pero igualmente a fuerte ritmo o en pistas de arena, la sensación de agarre y de mantenimiento de la trazada es elogiable. Su tamaño, relativamente compacto también es una buena ayuda para las maniobras no sólo urbanas, si nos metemos por terrenos más irregulares, sabemos con facilidad donde pisa cada rueda y la sensación de control en cada momento es muy buena. Amplios cristales y puesto elevado garantizan esa facilidad de conducción. El cambio automático es tradicional, de 5 relaciones y las posiciones “1” y “2” para bloquear las primeras marchas, más la posición “D” con el botoncito de bloqueo de la quinta, único juego que podemos hacer en zona de curvas en carretera. Una laguna importante, sobre todo por tratarse de un automático, es la ausencia de un apoyo para el pié izquierdo. Cambio automático, todo más fácil, aunque menos efectivo en carretera. La conducción TT con el cambio automático, se facilita en parte, usando la posición de primera “1” para los fuertes descensos. En los ascensos la limitación llega antes por los neumáticos si como los nuestros son más seguros para asfalto, por que por potencia, respuesta en baja y ángulos, se subiría por las paredes. Haciendo uso del grupo corto, la inserción del mismo es un punto muy mejorable. Es una inserción completamente mecánica y además de la incómoda palanca – por cierto con una iconografía errónea que te confunde – tenemos que efectuar la maniobra con el coche en movimiento, de 3 a 5 km/h, para que los engranajes se acoplen. Esto no siempre es posible, por lo que si prevemos necesitar el grupo reductor debemos meterlo antes de que empiece la acción. En carretera, rodando con sólo la tracción trasera, el comportamiento del coche es muy bueno, aparte de las nulas pérdidas de tracción y de disponer de sistema de control de estabilidad – raro es que nos pueda entrar en conducción incluso deportiva – es complicado que el coche nos haga cualquier extraño. Transmite muy bien las sensaciones al volante, cosa no fácil en coches así, y te da una confianza para meterte en curvas y apoyos como la de un turismo medio. Elegante y equipado, pero sin climatizador El aspecto externo de este “Limited” es un poco más elegante que el resto de la gama, desde su parrilla metálica hasta remates de más lujo. Dentro lo primero que uno ve es la tapicería de cuero, con asientos calefactables y de reglaje eléctrico, unos remates y detalles de confort al nivel de su precio, pero sin embargo no dispone de climatizador. Tampoco de muchos huecos o gran guantera, las plazas traseras utilizables por tres adultos, y la zona de carga aceptable con un portón que sostiene la rueda de repuesto y se abre sobre eje vertical por un lado y el cristal hacía arriba por otro. Este cristal nos facilita el acceso al maletero sin abrir la puerta, pero también es verdad que tenemos la rueda de repuesto por en medio. En cuanto al resto de equipamiento, con el nivel más alto de gama no debemos sentirnos defraudados, a los comentados asientos con regulación eléctrica debemos añadir una larga lista de elementos de confort, mecánicos y de seguridad. Desde programador de velocidad, ordenador de consumos, y equipo de audio con CD, hasta multitud de airbags, pasando por los sistemas de seguridad activa, como son el control de tracción, el sistema de frenado de emergencia o el estabilizador de la amortiguación en caso de detectar peligro de vuelco, cosa evidentemente que uno prefirió no poner a prueba. Pueden abatirse los asientos traseros y ganar así espacio de carga, hasta el techo el volumen disponible ya es considerable, aunque sea el Cherokee de “talla pequeña”. Prestaciones interesantes y consumos a la carta Los niveles de prestación son muy buenos en cifras de recuperaciones, acentuado por el cambio automático, permitiendo unas transiciones muy suaves a bajas vueltas y unas reducciones relativamente también para lo que es el tipo de cambio. La velocidad punta es más discreta a niveles máximos, pero te permite mantener hasta los 140/150 km/h con garantías de reserva de potencia aún. La aceleración si bien no es espectacular, si es aceptable. Para los amantes de las cifras su punta máxima esta en 174 km/h y la aceleración de 0 a 100 km/h de 13.5. Hay que comparar con otros TT puros. En todo tipo de uso, el consumo medio de nuestra prueba estuvo entre 11 y 12 l/100 km. En carretera hay que mantener velocidades discretas para no aumentar esta cifra, y todo dependerá de la prisa en los acelerones para acercarse al promedio homologado, pero en todo caso es cercano a los 10. Resumiendo Nuestra opinión resumida de este Cherokee es que en un tamaño idóneo para un uso fuera de carretera, sus aptitudes son muy buenas exceptuando el punto negativo de los irregulares bajos, pero más que suficiente para el usuario medio. Es un coche para usar su caja corta, sus buenos ángulos y mancharlo constantemente. Además sin perder un relativo confort y con un equipamiento alto, como debe esperarse de su precio, sin lujos sofisticados pero si bien acabado. Lo del cambio automático es cuestión de gustos, quizá mientras que no se ofrezca con un cambio secuencial yo optaría por la caja manual, que además mejorará el consumo.
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