Texto:
Eugenio Pinilla 26/03/2008.
Fotografías Com&Com. Publicado febrero 2008
Hace
un año ya se adelantaban las mejoras para la edición del XJ 2008, y desde
hace algunos meses ya se disfruta en nuestro mercado. Hay dos tallas, ésta
de 509 cm de largo y después está la “larga” con 522 ganados en la batalla
y por lo tanto en la habitabilidad.
La
gama de nuestro “corto” se base en nada menos que 5 motores, desde nuestro
diesel de 204 CV hasta los 440 del R V8 Sobrealimentado. El acabado de
todos es el Executive si bien este último disfruta de un nivel superior
exclusivo.
5
metros de confort
La
clásica berlina que es el XJ ha recibido en su última renovación unas
defensas nuevas, más limpias de formas enrasadas en su línea y no ha
cambiado nada en su forma de 3 cuerpos donde se da prioridad a un
habitáculo espacioso a lo ancho y largo, con una línea de asientos
tradicionalmente baja y un maletero de 470 litros bastante generoso.
Buen maletero pero soso
El
maletero es grande, pero no en la proporción del coche, está
excelentemente enmoquetado, pero carente de detalles. Además es muy plano
y profundo y las bolsas se pierden o se desparraman al no tener sujeciones
ni compartimentación de ningún tipo.
Bajo
el suelo del maletero encontramos la rueda de repuesto, que es de
emergencia con su set de herramientas y triángulos de emergencia.
Un
diesel que pasa desapercibido
El
motor diesel que monta nuestro XJ es un V6 de 2.7 litros, con una potencia
de 204 CV a 4.000 vueltas, pero mejor es su par máximo que llega a los 435
Nm a 1.900 vueltas, en una curva bastante plana y progresiva hasta las
4.000 vueltas de motor.
La
tracción es trasera y el cambio automático de 6 marchas. No tiene guía
secuencial, pero no pierde demasiado por el interface de uso que tiene, en
el que puedes reducir cómodamente todas las relaciones. Cuenta con control
de estabilidad como es de esperar en un coche así, y también con sistema
de frenado de emergencia.
El
grupo final está lógicamente hacia un desarrollo que favorece confort y
sobre todo consumos.
Su
sonoridad es estupenda incluso en frío, tanto es así que incluso te cuesta
distinguirlo en marcha.
La
suspensión es neumática y autorregulable, con lo que la altura del chasis
es constante sea cual sea la carga.
Lujoso interior pero primo hermano de Ford
El
XJ ha visto muy poco cambiado su interior, los asientos son de nuevo
diseño, tan cómodos como los de siempre pero ahora más estrechos de
estructura y que permiten el sistema de ventilación.
Los
materiales elegidos, son acogedores y de calidad, con tapicería completa
en piel, elementos metálicos y mandos que no es que sean malos pero nos
recuerdan a otros coches de la casa matriz y pierde un poco de su
personalidad.
La
iluminación nocturna es en tono verdoso, su salpicadero lo preside el
sistema de audio y navegación, rodeado de botones que en principio
impresiona, pero que luego es más cómodo e intuitivo que las típicas
rosetas tipo joystick que te marean de menú en menú.
El
coche está sembrado de detalles de confort destacando la iluminación de
cortesía, con todo tipo de luces, gálibos, ambiente, generales y de
entorno.
Las
plazas traseras están casi al mismo nivel que las delanteras, con buen
espacio consola de aireación, y un reposacodos en el que se pueden guardar
algunas cosas y donde están los posavasos traseros. Como es habitual dos
pasajeros atrás viajan de súper lujo, la plaza central es ya más de
compromiso y resta confort a las demás.
Interminable lista de equipamiento
Sólo
hay que echar un vistazo a su ficha de equipamiento, tiene de todo y más.
En lo principal está más que cubierto, los airbags se reproducen por todas
partes, el climatizador es doble pero no llega a las plazas traseras en su
control, en cuanto a seguridad tiene alarma de intrusión.
El
conductor es el más cuidado de todos, luces, limpias, freno de mano...
todo es automático. Los asientos y columna de la dirección tienen reglaje
eléctrico, y como guinda los pedales también.
El
sistema de navegación es de serie, con pantalla táctil y teléfono blue-tooh.
Tiene un cargador en el maletero, y es un equipo más tradicional, aquí
está en una generación por detrás ante los nuevos sistemas de disco duro y
conexiones multimedia.
Se
dejan algunas cositas para pagar aparte incluidas en nuestra unidad, como
la ventilación de asientos delanteros, los sensores de aparcamiento
delanteros - de serie sólo dispone de traseros - el control por voz
o el sistema de prevención de alcances que controla la distancia y
velocidad con el programador de crucero.
Silencio y confort al volante
Ya
el propio entorno te crea un clima de confort que sigue a la hora de
ajustar asientos en los que podemos regular el tamaño de la banqueta,
volante y hasta pedales. Todo a través de botoncitos queda como fabricado
para uno mismo. Sólo falta que la palanca de cambios pudiera también
regularse, ¡ojo que todo llega!
Una
vez a los mandos se inserta la “D” y a tirar millas.
La
agradable conducción te hace centrarte más en otras cosas que en lo que
tradicionalmente y sobre todo nosotros nos fijamos.
Pero
hay que contarlo claro. No tenemos guía secuencial, pero si un tipo de
cambio en “J” que nos permite una conducción deportiva muy similar a un
cambio normal, por un lado tenemos la típica guía “PRND” y por el otro las
marchas hasta segunda. En la confluencia – parte baja de esa hipotética
“J” a la derecha tenemos la “D” de conducción todo automático y por la
otra el “5” de la quinta marcha, con lo que pasando a la guía de la
izquierda podemos mover la palanca de 5 a segunda casi como un cambio
manual. Cuando le coges el truco tiene su gracia.
El
motor, que si bien no tiene una potencia máxima desorbitada, si tiene una
respuesta bastante buena y puede con casi todo. Este cambio y este motor
es una buena conjunción para una berlina de carácter tranquilo pero con la
que puedes imprimir cierto ritmo incluso en curvas.
Sin complejos en las curvas
Llegadas
las zonas reviradas podemos optar por una conducción igualmente cómoda que
te permite cierto ritmo siempre con el cambio automático, usar la guía
reductora para ajustar manualmente las marchas. Los periodos de reducción
tienen que tener un margen, como en casi todos los demás secuenciales sin
embrague, hay que esperar un mínimo nivel de revoluciones, con lo que
siempre estamos obligados a frenar un poco más de la cuenta para no entrar
descolgados en las curvas.
A
pesar de un balanceo acusado en las curvas, la velocidad de paso es muy
buena en curvas relativamente cerradas, pero en curvas abiertas de marchas
largas es impresionante, forzando trazadas de quitar el hipo este XJ nos
ha dejado sorprendidos, porque es absolutamente fiel al volante cuando el
ritmo es muy alto.
Agradecidos consumos
No se
puede decir que sea un mechero, tampoco ahora que es diesel y es más
barato, pero si está claro que para la masa que mueve y las prestaciones
que tiene, gastar 9 litros en el promedio de nuestra prueba es un consumo
muy razonable. Podemos quizá bajar algún litro andando todo el tiempo en
carretera con cruceros medios entre 120/130 y podemos subir a los 13 en
curvas de montaña. Poca cosa para un coche que se pone a cien en poco más
de 8 segundos con casi 2 toneladas de peso, que tiene un poder de
recuperación muy bueno y que su hablamos de punta, a 150 aún tenemos 3
marchas que meter.
La
competencia de berlinas diesel es más potente
El
mercado de las berlinas de lujo es ya un sector en el que prodiga los
motores diesel, pero las de su talla suelen tener motores más potentes.
Por precio desde luego se las ve con coches como el A8, la serie 7 de BMW,
o el Peatón de Volkswagen, pero por potencia está en la línea del más
barato de todos que es el Chrysler 200C, casi la mitad de precio.
RESUMEN
Confortable y lujosa berlina que monta un económico motor. Quizá le falte
algo de potencia bruta, pero por respuesta no se queda muy atrás para
luego ser un coche de consumos muy ajustados.
Sin
perder el lujo y la buena factura, amplio, lleno de detalles – excepto en
maletero – un confortable y representativo coche que apenas suena a
diesel. Su cambio obligadamente automático va en la línea de confort de
marcha del resto, pero no por eso se amilana en las curvas.
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