Texto: Eugenio
Pinilla 14/09/2007. Fotografías Com & Com.
Publicado septiembre 2007
La
gama del Bravo 2007 no es muy amplia, sobre todo para el mercado que le
toca. Es una gama con 3 motores de gasolina y 2 diesel, 4 niveles de
acabado pero no todos disponibles para todos los motores ni mucho menos.
El 1.9
MJET 16V es el más potente de los diesel, con 150 CV y también la versión
más cara de la gama en estos momentos.
Carrocería de líneas suaves y modernas
De
líneas curvas y suaves nos recuerda bastante aún al anterior Bravo, pero
puesto totalmente al día, con el recuerdo de los pilotos traseros. 4
puertas de acceso al habitáculo y portón trasero a un maletero de 400
litros, muy bueno en su categoría. En el acabado "Emotion" está rematado
con elegancia, desde defensas, llantas y espejos
Mecánica con guiños deportivos
El
motor del 1.9 MJET rinde 150 con la culata de 16V, tracción delantera con
caja manual de 6 marchas. La gestión es a base de turbo, con inyección
directa de raíl común de última generación. El par máximo lo entrega a
2000 rpm y es de 300 Nm, una cifra ya considerable. Disponemos de control
de estabilidad de serie, que incluye de tracción. Una mecánica que pasa de
lo puramente económico y busca un poco más de prestación aprovechando el
buen rendimiento aunque los consumos sean ligeramente peores.
Interior muy mejorado
Nuestra unidad incorpora sistema de navegación GPS que con su pantalla
mejora bastante la imagen del interior por el salpicadero. No obstante los
materiales tienen muy buena pinta y es agradable junto a una funcionalidad
correcta.
Los
asientos son de corte deportivo, con buena sujeción pero delante, atrás
los respaldos son algo bajos. En cuanto a espacio también mejor delante.
Atrás los pasajeros dependerán de los reglajes de los delanteros, la
banqueta es fija y no se le puede comer ni un centímetro a los 400.000 del
maletero.
Los
respaldos traseros son algo bajos, los reposacabezas han de levantarse
mucho para que sean funcionales con los ocupantes.
Los
detalles de confort tienen alguna lagunita, con luz interior de baja
intensidad, que parece que ahora está imponiéndose en los coches más
pequeños, pero sin embargo carece de un plafón general siendo las 4 luces
indirectas las que hacen su función, así encontramos que la luz del "copi"
tiene una luminosidad muy alta y molesta al encenderse en la oscuridad.
El
maletero está pelado de detalles para carga menuda, ni ganchos, ni
compartimentaciones, ni nada, es muy cuadrado y con buena boca, pero ni
tan siquiera permite un abatimiento con suelo plano.
El
equipamiento "Emotion" es tan caro como el Sport pero más enfocado al
confort
Es el
nivel más equipado de la gama, aunque su precio es similar al "Sport",
éste gasta los recursos en una concepción más deportiva y nuestro
"Emotion" disfruta de un climatizador automático bi-zona, con una
consolita de control propia y una buena facilidad de manejo. En el resto
de equipo en su precio no se echa en falta nada y destaca con luces y
limpias automáticos, programador de crucero, y airbags hasta de cortina.
El
conductor disfruta de sistema de arranque en cuesta y el control de
estabilidad, que siempre incluye de tracción y ABS.
Puesto a la italiana
Aunque
la sensación de volantes horizontales ya se ha perdido en los últimos
Fiat, aún el puesto conserva el estilo italiano de piernas más cortas. Es
decir la regulación media del volante es para piernas más cortas que por
ejemplo los coches alemanes. Así un servidor siempre llega al tope de la
regulación de distancia en el volante y los hay más patilargos que yo, sin
ir tampoco mordiendo el aro.
El
puesto en general es bueno con alguna puntualización. El cuadro de mandos
si bien es moderno y elegante, tiene una combinación de colores nada
efectiva. Los relojes de fondo gris y agujas anaranjadas no se ven
demasiado bien, y nada apenas si conduces con gafas de sol. Contrasta con
la buena y agradable visión de noche en tonos rojizos. En dicho cuadro
tenemos un display con las informaciones del ordenador de consumos,
elemento que no vemos en el listado de equipo pero que está en nuestra
unidad, junto a la temperatura exterior y la hora, información que se
repite en el display del navegador, pero no se que pasa sin él.
Contamos con un pedalier acabado en aluminio, con excelente reposo del pié
izquierdo y piel en todo el entorno de volante, cambio y freno de mano.
La
sensación pues a los mandos es bastante gustosa, con ese guiño rácing que
te hace echar de menos quizá un cambio de mejor tacto, y no por que éste
esté mal. Es un cambio como todos, sin problemas pero sin "tacto"
deportivo claro.
La
potencia ya exige algunas manos
Los
150 CV, y su forma de entregarlos digamos que comienzan a ser algo
delicados para sacarles todo el partido si no se es ya un conductor algo
experto. Nuestro Bravo muestra unas dotes muy buenas, sin tener una
amortiguación castigadora, y mantiene el nivel de comportamiento alto, y
casi cualquiera puede mantener un ritmo bueno pero sin buscarle las
cosquillas. Los sistemas electrónicos anulan las pérdidas que pueden
producirse sobre todo si el suelo está algo irregular.
Otra
cosa es sacarle todo el partido en curvas, donde tenemos que ir
constantemente regulando el acelerador para no darle trabajo a los
sistemas electrónicos y salir fuerte de cada curva. Hay frenos, y hay
empuje abajo, por lo que tampoco tenemos que usar el cambio en demasía y
si podemos tirar de bajos y lograr brillantes aceleraciones entre curva y
curva, donde el trabajo puede amontonarse, de aquí que haya que tener
ciertas manos ya para saborear todo el pastel. Es el comportamiento típico
de motor turbo, buena potencia y tracción delantera, donde sin los
sistemas electrónicos conectados es fácil "esquiar" si no se dosifica gas.
Las
seis marchas son de uso, quizá la sexta tiene un lógico desarrollo algo
largo pero el motor hace que sea una marcha de uso insertándola a bajas
vueltas sin problema alguno y gran beneficio para el consumo.
Estupenda la relación de prestaciones/consumos
Este
MJET con 16V gana algunos enteros prestacionales en relación al motor de
120 CV y 8V, y el consumo no se dispara sobre todo en sus prestaciones,
pero aquí hay 30 CV más que marcan la diferencia.
Esta
diferencia está en una punta de hasta los 209 km/h, 15 más, y una
aceleración de 9 segundos de 0 a 100 km/h, 1,5 s. Menos.
Los
consumos medios se mantienen en torno a los 7.6, un par de litros más que
los homologados, pero seguro que la conducción no es ni parecida, pues
aquí se trata de usar el coche en su esencia, sino, pues tenemos el de 120
CV.
Lo
bueno es que si nos ponemos el "mono" de carreras los consumos no se van
por las nubes, superamos los 11, pero en ritmos bien fuertes. En carretera
abierta desde luego el aproximarse a los 4,5 es a cruceros muy bajos,
pongamos un litro y medio más con cruceros "dentro de puntos" como mínimo,
con buena reserva de potencia hasta los 140/150 km/h.
Gran y fuerte competencia
El
Bravo pelea en el sector más competido, donde las grandes marcas tienen
que coparlo con grandes ofertas de gama. El Bravo ataca con buen precio,
sin ser un regalo, la relación de equipo/motor/precio es muy buena y se
encuentra en la zona más favorable de precio de sus rivales más directos,
con un nivel de equipo que no tiene que envidiar. En esta lista aparecen
coches como el Civic, Mazda 3, o Caliber con precios más bajos y por
encima Megane, León, Alteas, o Golf.
RESUMEN
Polivalente con tinte deportivo, 150 CV para disfrutar, con buenos
consumos en una carrocería polivalente en la que se enfrenta al mercado
más duro, pero sale airoso. Con buen equipo sin encarecer la potencia, con
un maletero bueno de espacio aunque falto de detalles y una conducción
bastante placentera pero recomendada a los más experto si hay que "darle
caña".
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