Texto: Equipo de pruebas Info Automóvil 25/02/2008.
Fotografías Com & Com. Publicado enero 2008
Ref motor: FIAT Tipo: G-169A3000
Nadie se queda indiferente cuando observa la reinterpretación que Fiat ha hecho del 500, como antes ya han hecho BMW con el Mini o Volkswagen con el Beetle. Aunque en el caso de nuestro mercado, el primer coche que vendrá a la mente de quienes lo observen es nuestro querido SEAT 600.
El más fotogénico del lugar
Quien pretenda pasar inadvertido con el Fiat 500 que desista de comprárselo. Desde luego, en la hipotética relación Miradas-Precio el Fiat 500 no tiene rival alguno. Durante la prueba del coche hemos podido observar que al circular a baja velocidad por ciudad casi todo el mundo o miraba el coche o hacía un comentario sobre él, incluso un hombre de mediana edad nos paró para pedirnos por favor que esperásemos un momento a que viese el coche su mujer, que estaba realizando compras en un centro comercial.
Viéndolo por fuera están claras sus reminiscencias: sabemos de que coche se trata. Para el diseño del 500, Fiat quiso involucrar al público a través del proyecto “500 wants you”, una página web a través de la cual se podían enviar ideas para el diseño del coche.
Sus líneas resultan simpáticas a la vez que clásicas. Quizá sea la parte delantera la que más nos transporte al pasado, en la que los faros redondos cobran protagonismo. Si lo vemos de lado observamos que la línea del Fiat 500 clásico se ha mantenido casi fielmente, aunque por detrás el diseño es donde quizá rompe más con su predecesor, fundamentalmente porque ahora no lleva el motor sobre el eje trasero.
Para remarcar el carácter de esta versión Sport, en la parte trasera encontraremos un escape deportivo cromado y un spoiler sobre el portón.
Motor lineal y falto de carácter
El Fiat 500 monta un motor de 1.4 litros con 100 CV y desarrolla un par máximo de 131 Nm a 4.250 rpm. Está asociado a una caja de cambios de 6 velocidades con desarrollos tirando a largos. Muestra cierta pereza para subir de vueltas, y no es hasta las 5.000 rpm cuando muestra toda su garra, aunque en ningún momento observaremos algún “punch” que nos dispare la adrenalina.
Hasta ese mencionado régimen el motor se muestra muy lineal, sin baches de potencia, lo que lo hace bastante agradable para circular por ciudad sin sobresaltos.
Regreso al pasado
Es por dentro donde el 500 nos proporciona más sensaciones retro, puesto que el salpicadero, quitando la zona del climatizador, nos lleva aquellos años 60 en los que el Fiat 500 o el Seat 600 estaban de moda.
Las líneas son sencillas y dan un aspecto hasta casi pobre, pero el toque retro es innegable y la calidad no está nada mal. Tras el volante encontramos una gran esfera que aglutina el cuadro de instrumentos, en el que vemos el cuentarrevoluciones justo debajo del velocímetro, una configuración hasta ahora no vista en ningún otro modelo actual. También contamos con ordenador de a bordo.
La palanca de cambios está situada en posición elevada, lo que hace más cómodo su accionamiento.
Otras concesiones a lo retro las encontramos en los tiradores interiores de las puertas imitando casi por completo a las originales del primer Fiat 500, o la consola central en acabado marfil, con la que el toque “vintage” ya es total…como lo es que el parasol del conductor sea pequeño y no tenga espejo…
El espacio interior que se ha conseguido de los 3,5 metros de largo es bastante bueno, estando homologado el coche para 4 ocupantes, aunque todos ellos disfrutarán de un espacio más que aceptable, más holgados delante que detrás.
Bien equipado
El equipo de serie del Fiat 500 es bastante completo, sobre todo en lo que se refiere a seguridad, pues de serie equipa 9 airbags, ABS, ESP, control de tracción y EBD. También tiene aire acondicionado, elevalunas eléctricos, asientos deportivos o cierre centralizado. Solo habría que añadir el climatizador para rematar.
Este acabado Sport (está disponible con uno más básico llamado “Pop” y uno más equipado llamado “Lounge”) tiene también de serie el sistema “Blue&Me”, desarrollado conjuntamente con Microsoft, y que permite conectar dispositivos MP3 y teléfonos móviles con Bluetooth, además de aportar una interfaz vocal que nos permitirá dar órdenes relacionadas con el teléfono móvil e incluso leer SMS entrantes sin tener que tocar el teléfono.
Una maleta y poco más
Parece que el maletero es un mal endémico de todos los coches que rememoran a sus gloriosos antepasados; peajes del diseño.
La cuestión es que el maletero del Fiat 500 es de sólo 185 litros y en él no encontramos ni siquiera una triste luz que ilumine la zona de carga. Paradójicamente quizá sea este el “detalle” más retro de todo el coche.
Deportivo pero con matices
Moverse en ciudad con el 500 es un juego de niños por su tamaño, no así por su reducido radio de giro y el tarado de sus amortiguadores, excesivamente rebotón al pasar por cualquier bache.
En carretera cabría esperar un comportamiento muy parejo al mostrado por el Panda 100 HP ya que utiliza la misma plataforma y por el tarado de los amortiguadores, pero las inclinaciones que sufre a la entrada de las curvas no invitan a jugar mucho con las inercias de la carrocería.
Disponemos de un botón llamado “Sport” que modifica la respuesta del acelerador y la dureza de la dirección, con lo que conseguimos de este modo unas sensaciones más acordes con el planteamiento esperado del apellido “Sport”.
Corre lo esperado, aunque consume un poco más
Los 100 CV extraídos del motor de 1.368 cm3, junto con un peso de 930 Kg. permiten al Fiat 500 alcanzar una velocidad punta de 182 km/h y alcanzar los 100 km/h desde parado en 10,5 segundos.
Una mejor aerodinámica quizá le permitiría mejorar estos registros. Donde si se nota este efecto es en los consumos, logrando una media de 7,8 litros/100 km en la prueba que resulta un poco elevada para las características del coche. En autopista se pueden lograr consumos de 6,9 litros/100 km sin sobrepasar los límites, pudiendo irnos hasta los 8,7 litros/100 km en conducción rápida o en ciudad.
Un sector muy particular
No tiene una larga lista de competidores en el mercado. El pequeño 500 al tener un motor relativamente potente filtra su competencia como utilitario. Al margen del significado estético, el 500 con 100 CV se las ve con el Twingo, o el Ka; y de momento ya está. En su versión Sport es el más caro de todos, sin un equipamiento que le destaque.
RESUMEN
Este Fiat 500 está indicado para aquellos nostálgicos que recuerden con simpatía al original y no quieran pasar desapercibidos por la calle, porque es un imán que capta las miradas de casi todos los transeúntes. El equipamiento es muy correcto para un coche que cuesta 14.500 €, aunque quizá el comprador del coche lo haga más con el corazón que con la calculadora.