Texto: Eugenio Pinilla 28/05/2010. Fotografías Com & Com. Publicado mayo 2010

Rf motor: BMW Tipo: D/N57D30A
Las particularidades de este GT de BMW son un portón con dos tipos de apertura, y una talla que está más cerca de la serie 7 cuando se enmarca dentro de la serie 5 comercialmente.
El portón no es nada nuevo, ya que el Skoda Superb ya lo estrenó así. Se trata de, siendo un 5 puertas, se pueda abrir como un sedán de 4. Pero en este BMW el cristal se prolonga casi hasta el vértice de la carrocería, con lo que el efecto sedán queda anulado y realmente el hueco del maletero así abierto es tan incómodo de cargar que no se llega a usar.
En el Superb es una cosa que si elogiamos y es que es realmente un 5 puertas en una línea sedán. Pero en el BMW Gran Turismo no, es un 5 puertas, que se abre como un 4, y eso es un paso atrás.
Digo yo que si hubieran diseñado un Serie 5 con carrocería Sedán y un portón similar al de Suberb, se hubieran ahorrado este coche.
Pero hay otra gran diferencia con el Serie 5 normal, y es que el GT es bastante más grande y conforma unas plazas traseras formidables de espacio.
Con unas banquetas que se pueden regular, y unos respaldos que se pueden tumbar, pero tan solo unos centímetros, porque han diseñado una mampara divisoria entre la fila se asientos traseros y el maletero de tal forma que limita la inclinación de estos respaldos.
Se separa así estas dos zonas, pero luego deja inútil el que se pueda echar para delante la banqueta para dar más capacidad al maletero, que suele ser la principal funcionalidad de esto. Estando la mampara, el tamaño del maletero base no se puede ampliar si no es abatiendo el respaldo.
Puertas sin marco
Otra de las particularidades de este GT son unas puertas carentes de marco y que en las traseras aparecen con una pieza de cristal realmente incómoda y que rompe toda la alegría de la ausencia del marco, además de delicado por lo expuesto que está.
El GT ya estrena algunas cosas de la nueva generación de la Serie 5 berlina que apareció después. Sobre todo en el interior, como es el salpicadero.
Una gama más corta
La gama de motores del GT no es tan amplia como la berlina, sólo dos versiones mecánicas de cada tipo de combustible, y por la zona alta, siempre con cambio automático y secuencial de 8 relaciones.
Nuestro motor es el menos potente de los diesel y ya cuenta con 245 CV, con la considerable cifra de 540 Nm de par máximo a tan sólo 1750 vueltas. Ni que decir tiene que con 8 relaciones los cambios son ultrasuaves y que lo que se complica es la conducción en manual con la guía secuencial.
Este GT te pide siempre una conducción en automático, ya que además podemos de forma opcional, programar la gestión del cambio en un programa más deportivo y si queremos reducir manualmente podemos también hacerlo. Echamos aquí de menos unas levas en el volante, ya que con tanta marcha si usamos la guía secuencial la mano se pasa el tiempo en el joystick - que no palanca - de cambios.
Consumos relativamente buenos
Pensando en su tamaño y potencia, esperas unas cifras de consumo más altas. Realmente las del papel parecen bastante buenas, y en la práctica no difieren mucho en una conducción turística.
Nuestras mediciones se acercaron bastante a las cifras homologadas y eso no es lo que suele pasar. Lo que si es cierto es que esa invitación a una conducción confortable y turística ayuda a lo buenos consumos, pero tenemos un coche con un potencial bastante grande para desmelenarnos con facilidad.
No se achica en curvas
Nuestra unidad llevaba la posibilidad de endurecer la suspensión, que ya de por si no es muy suave. Mediante una tecla pasamos a una posición sport o sport+ que podemos predefinir a nuestro gusto.
Yendo a buscar curvas, en el reglaje más deportivo posible el coche sorprende por lo que se aguanta, por la excelente velocidad de paso en curva, y por los frenos que parecen de un deportivo. El cambio de 8 marchas como ya he comentado te hace estar constantemente con la palanca en la mano en un coche que admite un margen de 2 ó 3 marchas, y si es verdad que en zona de curvas, podemos olvidarnos de las dos últimas, y sobre todo de la última que es claramente una relación de llaneo.
|