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    BMW Serie 3 Cabrio 330i: Descapotable para 4

    2 de abril de 2008
    La moda de los techos rígidos ha tardado algo más en llegar al descapotable de la serie 3 de BMW, y esto es por que la marca no renunciaba a las plazas traseras y hasta que no ha tenido un techo que las respete no se ha introducido en el cabrio de la gama

    Texto: Eugenio Pinilla 02/04/2008. Fotografías Com & Com. Publicado abril 2008

     

    Una gama que en este momento aún está pendiente de ser completada, con los cambios automáticos y la versión más deportiva “M”, pero que ya da a elegir entre 5 motores diferentes. Desde los 156 CV del 320i hasta los 306 del 335i, a la espera del M3 Cabrio de 420 CV. Se cuenta con una versión diesel de 204 CV.

    Un techo más complicado de guardar.

    BMW 330i Cabrio, prueba Para mantener las plazas traseras aunque sea en formato “coupé”, el techo ha de ser más grande con las consiguientes complicaciones para recogerse. Así que se ha diseñado una complicada estructura que se pliega en 3 capas que se guardan en el maletero. Un maletero de 350 litros, que se queda en 210 teóricos, por que en la práctica parece menos.

    El techo ocupa lo suyo y el maletero está prácticamente diseñado para él.

    La carrocería en general proviene de la versión coupé, y mantiene las 4 plazas de este, sin agrandar mucho la trasera, como ocurre en la mayoría de este tipo de descapotables.

    El tres litros es quizá el motor más compensado

    Nuestro coche es el 330i, 3 litros de cilindrada con 6 cilindros en línea que pasan su giro al tren trasero bajo un gobierno electrónico práctico y eficaz.

    Es un motor que guarda muy buenos bajos pero que según se va subiendo de vueltas se vuelve más explosivo. Agradece los regímenes altos en los que se muestra muy espectacular, pero se guarda suficiente empuje para poder ser conducido con el relajo que exige también un descapotable.

    El cambio es de 6 marchas, todas de uso, y entre las ayudas electrónicas encontramos de serie el Control de Frenada en Curva y por supuesto el de tracción y estabilidad. En opción nuestra unidad llevaba la dirección de desmultiplicación activa que sube el nivel de facilidad de conducción en curvas y maniobras.

    Interior prácticamente calcado del coupé

    BMW 330i Cabrio, prueba BMW 330i Cabrio, prueba BMW 330i Cabrio, prueba En cuanto a espacio no se ven demasiadas diferencias respecto al Serie 3 Coupé, quizá se cuente con algún centímetro menos en las plazas traseras, pero –dependiendo en parte de los reglajes de los asientos delanteros- son perfectamente utilizables por adultos. Y es que estos reglajes dan mucho de si admitiendo enormes tallas, hay que tenerlo en cuenta.

    El equipamiento dispuesto en la unidad que cayó en nuestras manos incluía tapicería de cuero con reglajes eléctricos de asientos. Esto da un empaque superior a un acabado que como ya he contado en otras ocasiones, está en alto nivel de materiales y ajustes pero con alguna carencia de diseño y ergonomía.

    Los detalles de confort sufren los rigores del techo móvil, desapareciendo las luces de lectura traseras. Delante hay mejores huecos que atrás, guantera obligada con llave y sobre el la consola central el ya típico gran joystick para el manejo de los diferentes sistemas de que se dispone con el módulo de navegación (opcional) y que sigo diciendo que es lento y complicado al no haber accesos directos.

    BMW 330i Cabrio, prueba Los asientos son estupendos con todo tipo de reglajes eléctricos y hasta extensión  manual de banqueta, pero los de delante en nuestro coche son opcionales, atrás son bastante recogedores también con un tamaño de banqueta muy bueno. Las cotas aquí atrás hasta de altura son muy decentes.

    El respaldo trasero podemos abatirlo y usar el espacio para carga, encontramos aquí si, y en el maletero no, unos ganchos para anclar bolsas. Tenemos una trampilla de comunicación con el maletero (opcional) para objetos largos y hasta unos improvisados huecos tras los respaldos para guardar algún objeto menudo o prendas de ropa.

    Equipamiento práctico sin demasiados lujos

    BMW 330i Cabrio, prueba De serie nos encontramos con una lista de elementos de equipamiento bastante enfocada a la conducción. El climatizador es doble, cuenta con una consola de aireadores traseros, los elementos de seguridad incluyen 4 pares de airbags, control de frenada en curva, sistema de frenado de emergencia, de estabilidad y de tracción.

    Pero debemos pagar aparte cosas como los automatismos en el encendido de faros y en los “limpias”, éstos hay que accionarlos la primera vez para que se queden de forma automática.

    Nuestra unidad llevaba otras utilidades para la conducción como el cambio de  luces automático, que funciona mejor en vías generales que en curvas con mucha señalización que impide la luz larga incluso de forma manual.

    Maletero mejor con techo puesto

    BMW 330i Cabrio, prueba BMW 330i Cabrio, prueba Los 350 litros del maletero cuando la capota está puesta son suficientes para un equipaje mediano de 4 personas o de fin de semana. Pero el diseño y compartimentación del mismo está enfocado a recibir la capota.

    Para plegarla tenemos que desplegar un tabique que limita la zona en la que es recibido el techo plegado. Pero ese tabique no tapa los huecos laterales en los que es fácil dejarse algún objeto e impedir el guardado perfecto de la capota en el maletero.

    Por lo demás no tiene detalles para la carga excepto una red y el comentado hueco que comunica con el interior.

    Bajo el maletero encontramos la batería y huecos para algunos objetos y los triángulos. No tenemos rueda de repuesto ni kit de reparación. Las ruedas son antipinchazos. O sea que si pinchas puedes rodar como si fuera una rueda de emergencia.

    Al volante de un deportivo, pero también de un coche de paseo

    BMW 330i Cabrio, prueba Se puede conducir este deportivo como tal, o como un agradable coche de paseo. El motor da juego para las cosas. Una vez descubierto, cosa en la que tarda algo más de la media, con tanto plegado, podemos rodar en marchas largas y disfrutar del viento y de un motor agradecido sin que sea espectacular. Y también podemos subir el régimen y sacar toda la esencia de sus 272 CV, jugando con un cambio que podía ser algo mejor en sus inserciones, quizá sean un poco duras, y el recorrido más bien justo, se salva de no ser largo al tener un pomo muy corto.

    Con la opción de la dirección activa, que nos aumenta la desmultiplicación a baja velocidad el tomar curvas cerradas es muy cómodo y fácil añadiendo una sensación de mayor efectividad.

    Todos los mandos que tocamos están acabados en piel, con un volante bastante acolchado y de aro grueso, en el que tenemos algunos pulsadores para sonido y control de voz (opcional), pero sin agobios de botones.

    El cuadro de mandos tampoco tiene complicaciones, presidido por los dos relojes principales, un completo set de testigos y dos mini displays con la información del ordenador de consumos y alertas.

    Rodando con el techo quitado se produce el típico túnel de aire por el pasillo, (ese que te echa los pelos largos a la cara). Se puede montar un para-vientos pero que anula las plazas traseras.

    Duro y dulce 

    Así es la amortiguación de este cabrio, sensiblemente dura paro que agradeces las zonas de buen piso donde hasta te atreves a quitar el control de estabilidad.

    BMW 330i Cabrio, prueba La velocidad de paso es muy buena, y es aconsejable en zonas de suelo descarnado mantener el sistema conectado, al menos el control de tracción ya que se gana bastante efectividad, evitando cierto nerviosismo del tren trasero al dar gas con algo de decisión.

    Es un coche que así te  permite ritmos altísimos, por que subimos hasta casi las 7.000 vueltas en los cambios, con lo que las relaciones se cierran mucho y las caídas de vueltas perfectas para tener siempre muchísima potencia bajo el pié.

    El moro entra en las curvas con una fidelidad inusual de un tracción trasera y la sensación de control y efectividad es siempre alta. Tan buena es su aceleración como su poder de frenada, sin que el sistema de ayuda de emergencia te de demasiado la lata.

    Consumos ajustados si no corres mucho

    Ya he comentado que este motor es el más ajustado de la gama en gasolina, deportivo arriba, suave abajo y con consumos según el uso. Por que es un coche que se pone a 250 km/h, y eso que está limitado, o que acelera de 0 a 100 km/h en 6.7 segundos y después te puedes permitir consumos en carretera de 7 litros cada 100 kms. Sin abusar de cruceros altos y con el techo puesto los 6.8 litros homologados en carretera no se quedan muy lejos.

    Si bien el coche en su salsa estará entre los 10 y 11 litros, un par de ellos más si estamos en zonas de curvas.

    Para unas prestaciones muy brillantes los consumos no son nada exagerados.

    Competencia europea

    En la fecha de hoy todos sus competidores directos están en el mercado europeo, el más directo en precio quizá sea el A4 Cabrio, pero también podemos tener en cuenta el Alfa Spider, e incluso el Eos. De todas formas el BMW es el más caro pero también el más potente.

    RESUMEN

    El cabrio de la serie 3 dispone ya de un techo rígido con el que se transforma en un coupé. Con un maletero estudiado para recibir ese gran techo que cubre 4 plazas. Algo más funcional y cómodo que otros modelos del estilo, pero que minimiza mucho el maletero con el techo abierto. Por lo demás mantiene el nivel de hechuras de un BMW, con un equipamiento muy funcional sin lujos y un motor en el caso del 330i muy equilibrado, de gran concepción deportiva pero que no maltrata la billetera en caso de una conducción razonablemente suave, en plan de disfrutar de su cualidad de descapotable. Con la dirección activa y la amortiguación deportiva es un coche de comportamiento exquisito en el que no es complicado dominar los 272 CV de que dispone.

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