Producción Com&Com. Texto: Eugenio Pinilla 01/11/2010. Fotografías Com&Com. Publicado noviembre 2010
Rf motor: FIAT Tipo: G-94 0A2000
Pero para que un coche así, uno de los más vendidos de Alfa, tenga un relevo digno, la marca ha tenido que poner mucho fuego en el asador para que el nuevo coche pueda recordarnos, y desde luego no salirse de su filosofía, al que sustituye, sino que también ha de asimilar el nuevo estilo de diseño de la casa.
Una especie de Mi-To grande, es lo que a uno se le viene a la cabeza una vez que vé el nuevo Giulietta, sus faros, su parrilla y sus particulares remates no hacen más que certificar que su hermano pequeño abrió el fuego, y pronto le llegará el turno al 159, el único Alfa que aún se vende con nombre numérico.
435 cm de un coche polivalente, enfrentado a los grandes superventas del mercado y que compite no con una gran gama, sino como todo Alfa, con una gran personalidad.
Como coche con imagen muy deportiva, que lo lleva en los genes, sus motores son relativamente altos, y si comparamos el pequeño diesel de 105 CV, la lista de rivales es enorme, sin embargo subiendo el listón de potencia, y sobre todo con gasolina, ésta se acorta bastante, quedando el Giulietta entre un ramillete de elegidos donde se codea con algún modelo premium por arriba y otros más populares por abajo, según pongamos o quitemos un milloncejo de "pesetas" en el precio.
Distinto por fuera y por dentro
El Guillieta se sale del patrón de diseño que ahora proponen las demás marcas, nos gusta y mucho que los faros apunten al frente y no se metan por los laterales sin ninguna funcionalidad. Los grupos ópticos, repetición de los del Mi-To tienen luces led para el día, y utiliza la última tecnología de haz, si bien los xenón hay que pagarlos aparte.
Repite el mismo piloto trasero también pero ahora se prolonga por el portón dándole más vida a la trasera, con líneas suaves y limpias, camuflando la maneta de apertura de la puerta trasera, como si de un 3 puertas se tratase, ya que el Giulietta sólo se fabrica con 5 puertas.
En el interior encontramos una calidad visual muy buena, con también un tacto en los mandos y un diseño de interruptores diferentes, pero no nos convence el diseño en general del salpicadero.
Primero porque éste es poco acogedor, nada envolvente porque es convexo, y los mandos están un poco salpicados por él, con la pantalla del navegador muy lejos aunque a la vista de todos.
La asignatura pendiente de la casa siguen siendo los asientos, o sobre todo los remates de éstos, los huecos delante carecen de uno grande, porque la guantera está más pensada como nevera y está compartimentada para meter 3 botes, y su buen espacio queda partido. Está refrigerada por supuesto, y en ella, en el fondo encontramos la toma usb, muy lejos de la mano del conductor y de la vista de cualquiera.
Un motor suave, pero no tan económico
La llegada de los nuevos Multi-air han dado un respiro a los propulsores de gasolina, siguiendo las mismas directrices que por ejemplo el grupo VAG con sus TSI, los nuevos motores del grupo FIAT, basan su rendimiento en la sobrealimentación con baja cilindrada e inyección directa. Algo que ya inventó Renault con su espectacular "5 GT Turbo" de carburación, pero aquel motor a pesar de solo 110 CV empujaba como un diablo una vez pasada esa fase de "lag" que lo hacía un poco incómodo de conducir.
El turbo ahora reúne unas cualidades que le dotan de una suavidad mejor, y una potencia arriba mucho mayor, gracias a la tecnología MultiAir.
El motor 1.4 TB de nuestro Giulietta, es de origen Fiat, y con menos de 1.400 CC alcanza los 170 CV a tan solo 5.500 vueltas, y no interesa para nada revolucionarlo demasiado, cambiando pronto se logra casi el mismo efecto con un andar más suave y unos consumos algo mejores.
Hablando de los consumos, sin ser un coche muy gastoso, nos esperábamos mejores cifras cuando no le exigimos la caballería.
El Giulietta es un coche muy agradable de conducir a lo tradicional, manejado el cambio con sus 6 marchas y disfrutando de la buena respuesta y gran aplomo y agilidad, no siendo un coche incómodo ni radical ni nada de eso.
Disponemos del interruptor denominado "ADN" por el que los parámetros de la gestión del motor, asistencia a la dirección, cambio, en caso de automático, el diferencial electrónico y el control de estabilidad. Todo cambia a una respuesta más deportiva, o más tranquila, pero si pudiéramos programar cada aspecto sería mejor.
Cuando pulsas la teclita, en la pantalla del navegador, tengas lo que tengas a la vista se te pone un indicador del turbo y de la potencia momentánea. No sin antes una pantalla previa de la configuración de los distintos elementos del coche. Una pantalla que te hace pensar que podemos configurar todos esos parámetros pero que no logramos "meter mano", así que suponemos que es informativa y punto.
Un maletero con detalles
El Giulietta cuida los detalles de su maletero, que en capacidad está en la media de su segmento, en la línea del sustituido 147 pero con algún litro más aprovechando su mayor tamaño exterior. Es una pena que los abatimientos no estén mejor estudiados.
En cuanto a equipamiento con este motor sólo se ofrece con el nivel intermedio de la gama, cuenta con una buena base, con climatizador doble, programador de velocidad pero alguna carencia de automátismos que merecería por el precio.