Así, el fabricante ruso Autovaz, participado en un 25% por el grupo francés Renault, ha solicitado al Gobierno de Rusia un crédito de 1.000 millones de dólares (unos 790 millones de euros) para ayudar a sus concesionarios a soportar los costes financieros, informa el diario 'Financial Times'.
El director general de Avtovaz, Yann Vincent, admitió recientemente que muchos concesionarios no podrían hacer frente a la compra de vehículos, a causa de la restricción del crédito y de la caída del mercado automovilístico.
En Alemania, Volkswagen y Daimler han creado programas de emergencia para socorrer a sus concesionarios, si bien las empresas no han facilitado los importes que han destinado a este concepto. El director de Ventas de Volkswagen en el mercado alemán, Werner, Eichhorn, explicó que la empresa no puede arriesgarse a perder una red comercial "que ha costado años construir".
Por su parte, el principal distribuidor de automóviles de Reino Unido, Pendragon, advirtió esta semana de que registrará en 2008 unas pérdidas antes de impuestos de 30 millones de libras (37 millones de euros).
En España, la Federación de Asociaciones de Concesionarios de Automoción (Faconauto) ha denunciado en reiteradas ocasiones que las multinacionales obligan a sus redes comerciales a seguir comprando vehículos, con lo que los costes financieros se han disparado hasta 900 millones de euros.
