La patronal de los concesionarios, Faconauto, advierte de que el déficit de mano de obra en los servicios de posventa no se cubrirá este año salvo en empresas con "absoluta necesidad" y que las nuevas contrataciones en este área "se han suspendido".
El secretario general de la Federación que agrupa a más de 3.000 concesionarios en España (Faconauto), Blas Vives, dijo, en declaraciones recogidas por EFE, que si la caída de las ventas de vehículos, que lleva un acumulado del 15 por ciento, se consolida a partir del primer semestre del año "pondría en situación difícil a la red de distribución".
Actualmente, 160.000 personas trabajan en este sector, cerca de 65.000 son empleos del área comercial y administrativa y 95.000 pertenecen a la red de posventa y talleres.
Blas Vives dijo que de momento no se han tomado "medidas de impacto" sobre el empleo en la red de comerciales, "ya que para tomar medidas de este tipo tiene que haber una línea de caída consolidada a partir de los seis meses".
Sin embargo, sí advirtió que de terminar el año con una caída de las ventas de vehículos del 30 por ciento, cerca de 20.000 empleos podrían perderse, un tercio de los actuales.
En este sentido pidió medidas económicas de "alcance" al nuevo Ejecutivo para devolver la confianza, contener la inflación y garantizar liquidez en el mercado.
El sector de los concesionarios, apuntó, es un negocio fundamentalmente financiero, que exige una circulación constante de entrada y salida de dinero y si este mercado se ve afectado, los empresarios reducirán sus costes variables, como los "contratos temporales".
De hecho, en el área de talleres, el déficit de mano de obra que asciende a 17.000 empleos, entre chapistas, pintores o mecánicos, "no se cubrirá salvo necesidad perentoria".
El empleo en el área de posventa ha ido aumentando en los últimos años cerca del 2,5 por ciento anual y ahora lo primero que se va a hacer es suspender nuevas contrataciones y tratar de utilizar al máximo los recursos humanos actuales, incluso con plantilla de otros departamentos que puedan ser compatibles.
"Con un entorno así, hay que tomar medidas de control de gastos y ser prudentes, ahora lo que necesitamos es todo el personal comercial para cambiar la actual línea de mercado", apuntó.
Vives explicó que la facturación en la actividad de venta ha disminuido cerca del 30 por ciento el pasado mes de marzo al sumar el descenso de las ventas y la caída del precio medio del vehículo que calcula en un 6,5 por ciento por unidad.
Por ello, pidió al nuevo Gobierno que haga un seguimiento de los sectores, como el del transporte y el del automóvil, menos "dinámicos en precios" y que absorben con sus márgenes determinados costes económicos.
Según Faconauto, precisamente las medidas que están tomando los concesionarios para aumentar la confianza al consumidor y "salvar la situación" son aumentar las promociones, hasta el 14 por ciento en los dos primeros meses o ampliar la garantía de los vehículos.
También, volvió a reiterar que para incentivar las ventas es necesario un programa de renovación del parque financiado con un capítulo presupuestario independiente del Impuesto de Matriculación, que "sólo es fuente de problemas y conflictos" porque distorsiona la demanda del mercado.