La Asociación señaló que la disminución de este tipo de siniestros se ha podido producir por la reducción del tráfico, a causa del encarecimiento del precio de los carburantes y de la desaceleración económica. Además, explicó que el mayor descenso se ha producido en las zonas del Mediterráneo, en especial en Barcelona, Alicante y Valencia.
Así, los golpes de chapa se redujeron un 12,59% en Barcelona durante los seis primeros meses del año, mientras que en Alicante este descenso se situó en el 12,47% y en Valencia la caída alcanzó el 12,65%.
Por otro lado, Unespa explicó que los viernes son los días de la semana en los que se produce un mayor número de siniestros leves, seguido de los lunes, mientras que en los fines de semana es cuando este tipo de golpes desciende, por el menor uso del automóvil.
La Asociación destacó que cada catorce segundos se produce un accidente leve en España, en especial en las grandes ciudades. Así, en Madrid este tipo de golpes se produce una vez cada 1,55 minutos, mientras que en Barcelona la frecuencia es de 2 minutos y 13 segundos.
No obstante, la frecuencia de golpes de chapa en las ciudades más pequeñas, como Zamora, Ceuta, Melilla, Teruel, Soria, Segovia, Palencia, Cuenca o Avila se sitúa en más de una hora.