La Dirección General de Salud Pública y Consumo de la Junta de Castilla y León ha abierto 13 expedientes sancionadores tras inspeccionar 305 concesionarios de vehículos durante los meses de marzo y abril dentro de una campaña de control de mercado sobre la información que se facilita a los compradores de turismos. Entre las irregularidades más frecuentes, informa Diario de León, se detectó la falta de puesta a disposición del comprador de una guía informativa de consumo de combustible y emisión de CO2.