Según se informó oficialmente, agentes de la Dirección General de la Policía han detenido a 21 personas, miembros de un grupo organizado que a través de la sociedad “Hermanos Castro Moreno Automóviles, S.L”, presuntamente se dedicaban a la importación de vehículos de alta gama, siendo sindicados por las autoridades como responsables de varios hechos delictivos relacionados con el fraude de impuestos a través de testaferros y sociedades instrumentales. Se estima que la cantidad defraudada podría ascender a tres millones de euros.
Los vehículos eran adquiridos en países de la Unión Europea como Alemania, Bélgica y Holanda y habían sido matriculados en España por personas con escasos o nulos recursos económicos y pertenecientes a ambientes marginales o de delincuencia. La mayor parte de estos titulares eran personas con antecedentes policiales, extranjeros que posiblemente desconocían el alcance fiscal de sus actos y, en tercer lugar, sociedades en cuyos órganos figuraban personas también con antecedentes. Esto hizo suponer que todos estos sujetos no habían tenido en su poder, ni habían sido propietarios de los vehículos. Algunos testaferros, que carecían de antecedentes policiales, fueron captados en la misma barriada donde residen los anteriores, aceptando todos ellos figurar en la matriculación de los vehículos a cambio de pequeñas gratificaciones de dinero.
Según las fuentes, con esta artimaña la sociedad HCM Automóviles S.L. conseguía que las obligaciones fiscales del pago de los impuestos de Matriculación, el Impuesto sobre el Valor Añadido o el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales recayeran en los testaferros y sociedades instrumentales. Impuestos, todos ellos, que no han sido satisfechos a la Hacienda Pública o se han realizado efectuando ingresos de cantidades irrisorias de dinero.
Veintiuna personas de Madrid habrían sido utilizadas como “testaferros” y cinco sociedades instrumentales (también denominadas “truchas”), con domicilios sociales en Madrid, Alicante e Ibiza, fueron creadas para el fraude.
Un total de 21 personas han sido detenidas a lo largo de las investigaciones practicadas, la mayoría testaferros. Entre los detenidos también se encuentran la persona que se habría encargado de la captación de los anteriores; el titular de una asesoría de la calle Juan Pradillo, en Madrid, y dos de sus empleados, en la cual se habrían realizado los trámites de las matriculaciones a nombre de los testaferros; los administradores de las sociedades instrumentales, y el principal artífice y beneficiado económicamente del fraude.
Los vehículos eran adquiridos en países de la Unión Europea como Alemania, Bélgica y Holanda y habían sido matriculados en España por personas con escasos o nulos recursos económicos y pertenecientes a ambientes marginales o de delincuencia. La mayor parte de estos titulares eran personas con antecedentes policiales, extranjeros que posiblemente desconocían el alcance fiscal de sus actos y, en tercer lugar, sociedades en cuyos órganos figuraban personas también con antecedentes. Esto hizo suponer que todos estos sujetos no habían tenido en su poder, ni habían sido propietarios de los vehículos. Algunos testaferros, que carecían de antecedentes policiales, fueron captados en la misma barriada donde residen los anteriores, aceptando todos ellos figurar en la matriculación de los vehículos a cambio de pequeñas gratificaciones de dinero.
Según las fuentes, con esta artimaña la sociedad HCM Automóviles S.L. conseguía que las obligaciones fiscales del pago de los impuestos de Matriculación, el Impuesto sobre el Valor Añadido o el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales recayeran en los testaferros y sociedades instrumentales. Impuestos, todos ellos, que no han sido satisfechos a la Hacienda Pública o se han realizado efectuando ingresos de cantidades irrisorias de dinero.
Veintiuna personas de Madrid habrían sido utilizadas como “testaferros” y cinco sociedades instrumentales (también denominadas “truchas”), con domicilios sociales en Madrid, Alicante e Ibiza, fueron creadas para el fraude.
Un total de 21 personas han sido detenidas a lo largo de las investigaciones practicadas, la mayoría testaferros. Entre los detenidos también se encuentran la persona que se habría encargado de la captación de los anteriores; el titular de una asesoría de la calle Juan Pradillo, en Madrid, y dos de sus empleados, en la cual se habrían realizado los trámites de las matriculaciones a nombre de los testaferros; los administradores de las sociedades instrumentales, y el principal artífice y beneficiado económicamente del fraude.