Los delincuentes sustraen las llaves de los vehículos tras distraer a los empleados Robos al descuido en concesionarios de coches de lujo. Es la especialidad de una banda de ladrones que actúa en la provincia de Valencia. Los delincuentes simulan ser clientes interesados en probar coches para así averiguar dónde guardan las llaves. Después distraen a los empleados y se apoderan de los vehículos.
Hasta ahora los robos al descuido eran el medio para sustraer pequeños botines: carteras, prendas de vestir, dinero, teléfonos móviles... Pero los tiempos han cambiado. La policía busca a dos magrebíes acusados de robar durante los últimos meses varios vehículos de alta gama con este método en concesionarios de la provincia de Valencia.
Los ladrones se hacen pasar por personas adineradas para ganarse la confianza de los vendedores. Posteriormente, los individuos piden que algún empleado del concesionario les explique las prestaciones del coche, pero su verdadera intención es fijarse en el lugar donde el trabajador guarda las llaves. Tras concluir la farsa, los maleantes se marchan con la promesa de volver otro día para comprar el vehículo. Horas o días más tarde regresan al establecimiento y vigilan a los empleados para robar el coche al descuido en el momento en que menos personal hay en el concesionario.
Se inventan excusas
Esta forma de actuar se ha repetido en varias sustracciones de automóviles de lujo durante los últimos meses en la provincia de Valencia, tanto en demarcación de la Guardia Civil como de la Policía Nacional. La policía sospecha que los dos magrebíes no son más que la punta del iceberg. Todo apunta a que pertenecen a una banda internacional que se dedica a robar coches de lujo que luego venden en el extranjero con documentación falsa.
La Policía Local de Alboraya ha recuperado en Port Saplaya dos vehículos de alta gama sustraídos de diferentes concesionarios de la provincia. Al inspeccionar un garaje de esta zona costera, uno de los agentes descubrió un Audi Q7 de color negro totalmente nuevo. Había sido robado al descuido en un concesionario de Sagunto.
Había un detalle que despertó las sospechas de los agentes: la matrícula pertenecía a un Seat Ibiza. Al percatarse de la presencia policial, el ladrón del coche, de unos 30 años, huyó. Tras golpear varios vehículos se estrelló contra un seto y continuó su fuga a pie. Muy cerca del lugar, la policía encontró otro Audi, un A4, que estaba aparcado en la calle y que también tenía matrícula falsa.
Todo apunta a que el grupo delictivo es autor del robo de otro Audi Q7 que fue sustraído de la misma manera, a principios de junio, en un concesionario de Xàtiva. El vehículo en cuestión, un modelo nuevo, amplio, potente y robusto, ronda los 60.000 euros.
Hasta ahora los robos al descuido eran el medio para sustraer pequeños botines: carteras, prendas de vestir, dinero, teléfonos móviles... Pero los tiempos han cambiado. La policía busca a dos magrebíes acusados de robar durante los últimos meses varios vehículos de alta gama con este método en concesionarios de la provincia de Valencia.
Los ladrones se hacen pasar por personas adineradas para ganarse la confianza de los vendedores. Posteriormente, los individuos piden que algún empleado del concesionario les explique las prestaciones del coche, pero su verdadera intención es fijarse en el lugar donde el trabajador guarda las llaves. Tras concluir la farsa, los maleantes se marchan con la promesa de volver otro día para comprar el vehículo. Horas o días más tarde regresan al establecimiento y vigilan a los empleados para robar el coche al descuido en el momento en que menos personal hay en el concesionario.
Se inventan excusas
Esta forma de actuar se ha repetido en varias sustracciones de automóviles de lujo durante los últimos meses en la provincia de Valencia, tanto en demarcación de la Guardia Civil como de la Policía Nacional. La policía sospecha que los dos magrebíes no son más que la punta del iceberg. Todo apunta a que pertenecen a una banda internacional que se dedica a robar coches de lujo que luego venden en el extranjero con documentación falsa.
La Policía Local de Alboraya ha recuperado en Port Saplaya dos vehículos de alta gama sustraídos de diferentes concesionarios de la provincia. Al inspeccionar un garaje de esta zona costera, uno de los agentes descubrió un Audi Q7 de color negro totalmente nuevo. Había sido robado al descuido en un concesionario de Sagunto.
Había un detalle que despertó las sospechas de los agentes: la matrícula pertenecía a un Seat Ibiza. Al percatarse de la presencia policial, el ladrón del coche, de unos 30 años, huyó. Tras golpear varios vehículos se estrelló contra un seto y continuó su fuga a pie. Muy cerca del lugar, la policía encontró otro Audi, un A4, que estaba aparcado en la calle y que también tenía matrícula falsa.
Todo apunta a que el grupo delictivo es autor del robo de otro Audi Q7 que fue sustraído de la misma manera, a principios de junio, en un concesionario de Xàtiva. El vehículo en cuestión, un modelo nuevo, amplio, potente y robusto, ronda los 60.000 euros.