La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) convoca un peregrinaje a la Basílica de El Pilar el próximo 16 de abril para pedir la desmilitarización del cuerpo
Agentes de la Guardia Civil de Tráfico comienzan una "huelga encubierta" dirigida a reducir el número de multas y, con ello, la recaudación. Su objetivo es presionar a las autoridades para mejorar su situación laboral, según fuentes de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC). Esta medida es de carácter indefinido y coincide con las Semana Santa.
Una nota interna de este colectivo pide a los agentes de Tráfico que colaboren con la DGT para reducir los altos índices de siniestralidad en las carreteras españolas. Su propósito es, a priori, "erradicar la imagen del 'agente número' y simple funcionario recaudador".
Fuentes de esta asociación de guardias civiles reconocen que se trata de una 'huelga' encubierta, lo que ya se conoce como 'huelga de bolis caídos', con la que se trata de presionar para que se mejoren sus condiciones salariales, a través de la reducción del número de multas.
Para ello, emplearán "toda las habilidades pedagógicas de los profesionales, explicando y concienciando a los usuarios de las vías los peligros observados". Con ello trata de fomentar la labor preventiva de los agentes por encima de la sancionadora, dejando la multa "como último recurso aplicable a los casos extremos más graves".
Esta medida, que ya se ha aplicado en los últimos meses provocó que, por ejemplo, en la Comunidad Valenciana cayeran las denuncias de 1.300 a 200 durante el pasado febrero, respecto a 2004, según fuentes del Instituto Armado.
Fuente: El Mundo
Agentes de la Guardia Civil de Tráfico comienzan una "huelga encubierta" dirigida a reducir el número de multas y, con ello, la recaudación. Su objetivo es presionar a las autoridades para mejorar su situación laboral, según fuentes de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC). Esta medida es de carácter indefinido y coincide con las Semana Santa.
Una nota interna de este colectivo pide a los agentes de Tráfico que colaboren con la DGT para reducir los altos índices de siniestralidad en las carreteras españolas. Su propósito es, a priori, "erradicar la imagen del 'agente número' y simple funcionario recaudador".
Fuentes de esta asociación de guardias civiles reconocen que se trata de una 'huelga' encubierta, lo que ya se conoce como 'huelga de bolis caídos', con la que se trata de presionar para que se mejoren sus condiciones salariales, a través de la reducción del número de multas.
Para ello, emplearán "toda las habilidades pedagógicas de los profesionales, explicando y concienciando a los usuarios de las vías los peligros observados". Con ello trata de fomentar la labor preventiva de los agentes por encima de la sancionadora, dejando la multa "como último recurso aplicable a los casos extremos más graves".
Esta medida, que ya se ha aplicado en los últimos meses provocó que, por ejemplo, en la Comunidad Valenciana cayeran las denuncias de 1.300 a 200 durante el pasado febrero, respecto a 2004, según fuentes del Instituto Armado.
Fuente: El Mundo