La Audiencia de Valencia ha anulado la indemnización de 10.159 euros que un juzgado impuso a un taller de coches después de que el dueño de un turismo demandara al establecimiento. El motor del automóvil se le desprendió mes y medio después de una reparación en el local.
La razón del tribunal al anular la indemnización es que el propietario decidió llevar el coche a otro taller para la nueva reparación. La primera empresa no supo, por tanto, de la avería ni tuvo posibilidad de inspeccionar el coche tras el fallo mecánico.
La razón del tribunal al anular la indemnización es que el propietario decidió llevar el coche a otro taller para la nueva reparación. La primera empresa no supo, por tanto, de la avería ni tuvo posibilidad de inspeccionar el coche tras el fallo mecánico.