Ante más de 200.000 espectadores, los dos vehículos del equipo Volkswagen Motorsport dejaron atrás a otros coches WRC más potentes y consiguieron unas meritorias 11ª y 14ª posiciones finales en la clasificación general, respectivamente. "El Rallye de Suecia es uno de los momentos más destacados del Mundial, ya que solo aquí se usan neumáticos de clavos para la nieve y el hielo durante toda la prueba. Esto le da un carácter único, por lo que fue muy importante para nuestro equipo el poder acumular experiencia para poder llegar con la mejor preparación posible el próximo año con el Polo R WRC", declaró el director de Volkswagen Motorsport, Kris Nissen. "Sébastien Ogier y Andreas Mikkelsen controlaron con eficiencia la clase Super 2000 y no solo fueron muy rápidos, sino que también condujeron con mucha fiabilidad; además, nuestros dos Fabia no tuvieron ningún problema, por lo que hay que agradecer a todo el equipo su excelente trabajo".
El Rallye de Suecia, con más de 350 kilómetros cronometrados divididos en 24 tramos especiales por la provincia sueca de Värmlands Län y también una parte de Noruega, ofreció a los espectadores la competición de rallyes en su formato más espectacular. Las altas velocidades, los largos derrapes y los grandes saltos por los caminos helados hicieron vibrar a los aficionados que rodeaban cada tramo. Los Škoda Fabia del Grupo Volkswagen, inscritos por Volkswagen Motorsport, se posicionaron entre los favoritos del público desde el principio. Sébastien Ogier se hizo con el liderato de la clase S2000 en el tramo inaugural. Con ocho tramos entre los diez primeros y dando espectáculo, Ogier estuvo constantemente en el grupo de cabeza con los vehículos más potentes. "Fue un rallye muy bueno para nosotros, estoy muy contento con nuestra victoria en la clase S. Las condiciones en los tramos fueron mejores de lo que esperaba y fue muy divertido conducir aquí. Nuestro ritmo fue muy bueno y, dado que nuestros compañeros de equipo fueron muy rápidos también, el rallye ha sido muy interesante y ha aportado información importante a todo el equipo. Después de todo, ha sido el primer rallye sobre nieve y hielo con neumáticos de clavos para nuestro equipo", explicó el piloto francés de 28 años. Ni siquiera un pinchazo en el 12º tramo, ni el cambio del filtro de combustible tras el 18º, pudieron frenar a Ogier e Ingrassia.
El actual campeón del Campeonato IRC, Andreas Mikkelsen, de 22 años, disfrutó de los tramos en su Noruega natal durante el viernes y pudo seguir el ritmo de su compañero de equipo, pero un pinchazo en el 22º tramo especial le hizo perder un tiempo muy valioso y también una segunda posición en la clase S que tenía casi asegurada. "Mi segundo rallye con Volkswagen fue una experiencia muy buena, a pesar de la decepción de perder la segunda plaza. Nuestro primer rallye juntos el año pasado fue la primera prueba del WRC para el equipo. Es alentador ver lo mucho que el equipo ha evolucionado desde entonces. El trabajo del equipo está siendo fabuloso", afirmó el piloto de Škoda UK, quien este año, junto a su copiloto Ola Floene, compite en algunos rallyes del Campeonato del Mundo WRC para Volkswagen y al mismo tiempo defiende su título en el IRC. "En comparación con las carreras del IRC, hay que plantear las pruebas del WRC de una forma un poco distinta. Los rallyes son más largos, pero al mismo tiempo tienes menos oportunidades durante las paradas en el parque de servicio. No puedes conducir de forma tan inflexible, pero quieres ir igual de rápido".
/Fuente: Volkswagen Motorsport Prensa.
