El Campeonísimo Sebastian Loeb se pondrá a los mandos del coche de carreras más potente de su carrera para afrontar la espectacular subida a Pikes Peak en los Estados Unidos el próximo 30 de junio.
Peugeot ha fabricado sobre la base de un 208 un prototipo con 875 CV de potencia, logrando aligerar el coche hasta esos mismos kilos. Con ello la relación peso/potencia es cercana a la de un F1 al mejor nivel de un coche de Sport Prototipos de resistencia, de donde Peugeot ha sacado la tecnología y experiencia para construir este espectacular modelo.
La prueba, que se corre sobre todo asfalto desde el pasado año, tiene el gran inconveniente de correrse a mucha altura, desde los 2.865 metros hasta más de 4.000 donde los motores, sobre todo atmosféricos, pierden mucha potencia. Dada su especial reglamentación la limitación de los coches participantes es muy abierta y los ingenieros pueden poner toda la fantasía y tecnología que les parezca oportuno, pudiéndose ver cada años los más espectaculares coches de carreras.
Para Peugeot, con el mejor piloto de este tipo de trazado y un coche de 1 Kg de peso por cada CV de potencia, todo lo que no sea ganar será un fracaso.