Un fin de semana que había comenzado con problemas para Fernando, terminó de la misma manera, con un abandono a falta de poco más de una vuelta y de esa forma, pierde el liderato del Mundial, el que ahora lidera Massa con 39 puntos, mientras que Fernando comparte la segunda posición con Vettel -ganador en Sepang- con 37 unidades cada uno.
Ya en la vuelta de formación comenzaron los problemas para Alonso, que percibió que el embrague de su Ferrari no funcionaba y tuvo que arreglárselas para cambiar de marchas dando toques al acelerador cada vez que debía subir o bajar de velocidad. Esto fue una complicación inicial que vio sus primeros problemas cuando se dio la salida, momento en el que Fernando perdió un par de posiciones con Hamilton y Massa, aunque ganaba a su vez tres superando a otros coches.
Sin embargo, las dificultades de Fernando le impedían luchar de igual a igual con los coches de similares prestaciones. Vio como Hamilton, Button y Massa se instalaron delante de él, pudiendo hacer muy poco. A pesar de todo mantuvo el ritmo, optó por una estrategia de parar muy tarde a cambiar ruedas (vuelta 36, faltaban 20 para el final) lo que le hizo adelantar mucho terreno, pero que al regresar a pista luego de la detención, volvió a la realidad y estaba noveno.
De allí en más, volvió a hacer proezas con un coche en inferioridad de condiciones, pero que a pesar de ello, no pudo avanzar más del noveno lugar, todo ello a pesar de haberlo intentado con Button en varias ocasiones. Faltando poco más de una vuelta, un humo blanco dictó sentencia y Fernando Alonso quedó tirado en pista con el motor roto. De regreso a boxes, nos decía lo siguiente:
“Está claro que retirarse no es algo agradable, y menos faltando tan poco, pero es mejor que suceda en un día como hoy, en el que iba noveno y me iba a llevar solamente dos puntos”.
“He tenido un problema desde la vuelta de formación. Me he quedado sin embrague, y tuve que hacer lo que pude en cada una de las curvas, ya que en cada una de ellas el coche entraba muy descontrolado. Cada vez que cambiaba de marcha, debía dar un acelerón para que entrase. Ha sido una carrera muy difícil para mí, la más dura que me ha tocado hacer en mi vida, y debemos estar orgullosos de haber hecho casi toda la carrera, y adonde hemos llegado, a pesar de los problemas que hemos tenido”.
“La carrera ha sido un poco atípica y los RedBull no han tenido dificultades para ganar. Nosotros, que somos el equipo que va detrás de ellos, hemos tenido una carrera difícil, con una clasificación muy mala y ojala que en China le podamos poner las cosas más difíciles”.
“En esta carrera hemos estado casi al mismo nivel con McLaren, pero RedBull está un paso adelante, esperemos que en pocas carreras les alcancemos. Ojala que para el GP de España estemos ya a la altura de ellos”.
/Fernando Alonso
