Aunque no empezaba bien la carrera el sábado al perder en la tercera uno de los R18 por accidente, Audi ha sabido mantener una de sus unidades peleando por la victoria hasta el final, donde en las últimas paradas en boxes se alternaba la cabeza con el más rápido de los Peugeot. El vencedor, el Audi R18 TDI pilotado por Fasser-Lotterer-Treluyer entraba en meta, tras 24 horas de carrera, a 13 segundos del Peugeot 908 de Bourdais-Pagenaud-Lamy.
Es la décima victoria de Audo en Le Mans, pero tras perder un segundo coche en el primer tercio de carrera, la responsabilidad quedaba en el R18 nº2 que con más de tres cuartos de tiempo por delante tenía que aguantar a toda la escuadra Peugeot que no perdía ninguno de sus coches. Fasser, Lotterer y Treluyer, salían desde la Pole, y tenían que aguantar a los tres Peugeot oficiales, más algún otro que se sumaba a las primeras posiciones durante la carrera.
Nuestro compatriota Gene llegó a liderar la prueba durante alguna fase de las 24 horas, y en la mañana del domingo los cuatro vehículos más rápidos se mantenían rodando, apenas separados por escasos segundos unos de otros, en la cabeza de la carrera. El liderato cambiaba de manos continuamente, haciéndolo también en función de las diferentes estrategias. Pero Fässler, Lotterer y Tréluyer iban imponiendo su Audi, que en el primer año de la reducción de tamaño de los motores también se impuso claramente como el coche más rápido en la pista de Le Mans. Con 3m 25.289s, André Lotterer logró en la 229ª vuelta de carrera batir el mejor tiempo alcanzado durante la calificación.
La fiabilidad del nuevo Audi R18 TDi resultaba muy sólida pues a lo largo de toda la carrera, no tuvo que acudir a los boxes en ningún momento para realizar una parada no programada. Únicamente un pequeño problema con el depósito de combustible supuso un quebradero. Los 65 litros de capacidad total del depósito de combustible no podían ser utilizados.
En consecuencia, André Lotterer tendría que ganar la suficiente ventaja para realizar una parada adicional para repostar combustible en la fase final de la carrera. Y eso además, bajo unas condiciones extremadamente difíciles debido a la pertinaz llovizna que caía, que en ocasiones hizo que la pista estuviera demasiado deslizante.
Lotterer dominó esos inconvenientes. Tras realizar la última parada, el piloto alemán comenzó su último tramo de carrera con una ventaja de siete segundos sobre el Peugeot que marchaba situado en segunda posición. Al final de la carrera, entre el entusiasta y frenético aplauso de sus compañeros de equipo Marcel Fässler y Benoît Tréluyer y de todos los miembros de la escuadra Audi, fue él quien cruzó la línea de meta después de 24 Horas de dura lucha con una ventaja de 13,420 segundos sobre el segundo clasificado. Para los tres pilotos de Audi, que el año pasado acabaron la carrera en segunda posición, esta fue su primera victoria en las 24 Horas de Le Mans, al tiempo que con ella Audi suma ya su décima corona en esta mítica prueba.
"Ha sido un fantástico triunfo, una victoria excepcional de la tecnología ultraligera de Audi, logrado además bajo condiciones de extrema dificultad" comentaba Rupert Stadler, Presidente del Consejo de Administración de Audi AG, quien disfrutó personalmente de la excitante carrera en los boxes. "Después de que obtuviéramos una rotunda victoria el pasado año gracias a la fiabilidad y a la eficiencia, en esta nueva edición no sólo tuvimos el coche más fiable, sino también el más rápido".
Allan McNish y Mike Rockenfeller no sufrieron lesiones en los extremadamente graves accidentes que sufrieron durante el primer tercio de la carrera. McNish, en el Audi R18 TDI con el dorsal número 3, había tomado la delantera de la prueba antes del final de la primera hora cuando un coche GT impactó contra su rueda trasera izquierda en la sección de "La Chapelle". El R18 TDI se salió de la pista e impactó brutalmente contra la barrera volcando violentamente. El monocasco de fibra de carbono del Audi R18 TDI resistió el choque. McNish fue capaz de salir por su propio pie e ileso de entre los escombros y volvió al circuito después de superar un control médico preventivo en el hospital.
En cuanto a Mike Rockenfeller, demostró que tiene un ángel de la guarda aún mayor cuando poco antes de las 11 de la noche , mientras rodaba en segunda posición en carrera, también fue tocado por un vehículo GT en su rueda izquierda cuando circulaba a una velocidad aproximada de 300 km/h. El Audi R18 TDI giró a la izquierda y chocó violentamente a 270 km/h contra el guarda raíl a la entrada de la curva de "Indianápolis". El Audi resistió el impacto. El paragolpes delantero, los elementos absorbentes de energía y todas las demás medidas de seguridad pasiva introducidas en el coche cumplieron a la perfección con su cometido. Mike Rockenfeller fue capaz de salir por sí mismo del coche. Como medida de precaución, pasó la noche en el hospital y fue dado de alta nuevamente durante la mañana del domingo.
"Las medidas de seguridad de Audi son realmente increíbles y han salvado mi vida", dijo Mike Rockenfeller. "Nunca antes había tenido un accidente así en mi carrera y espero no volver a pasar por una experiencia así nunca más en mi vida". Allan McNish se expresaba en términos similares: "Quiero darle las gracias a los diseñadores de Audi por haber desarrollado un coche del que se puede salir completamente ileso después de sufrir tan graves accidentes"
Al conseguir su décima victoria en trece años de participación, Audi ha añadido un nuevo capítulo a su impresionante historia de éxitos en las 24 Horas de Le Mans.
Clasificación oficial de las 24 Horas de Le Mans
/Fuente: Com&Com; - Audi