Primera victoria de un diesel en la carrera de 24 horas más famosa del mundo
Audi ha escrito un importante capítulo en la historia de la competición automovilística con su histórico triunfo en las 24 Horas de Le Mans. El nuevo Audi R10 TDI se ha convertido en el primer diesel en ganar la carrera automovilística más dura y famosa del mundo. Frente a un récord de 235.000 espectadores, Frank Biela (Alemania), Emanuele Pirro (Italia) y Marco Werner (Alemania) lograron la sexta y la más importante victoria para Audi, hasta el momento. Dindo Capello (Italia) Tom Kristensen (Dinamarca) y Allan McNish (Escocia) también alcanzaron el podio siendo los terceros en la general.
Tanto el público allí presente, como los millones de espectadores de todo el mundo por televisión, pudieron presenciar la impresionante demostración de la tecnología TDI de Audi y con ello, el perfecto funcionamiento de sus modernos motores diesel. Los dos R10 TDI de Audi que compitieron en Le Mans estaban impulsados por un motor TDI de 12 válvulas y 650 CV, lo que convirtió a estos vehículos en los más rápidos y económicos de las 24 Horas.
Durante la carrera, uno de los nuevos coches deportivos diesel de Ingolstadt estuvo constantemente a la cabeza. De hecho, el piloto con récord de victorias en Le Mans, Tom Kristensen, realizó la vuelta más rápida de la carrera en 3m. 31.211s, siendo el primer piloto en completar 16 vueltas con un único depósito de combustible. Audi batió también un nuevo récord de distancia al completar 380 vueltas.
La ventaja en el consumo de combustible del motor del Audi R10 TDI durante las 24 Horas de Le Mans, también fue apreciada por los espectadores. Ya que por regla general, los pilotos de Audi únicamente entraron en boxes cada 14 vueltas para repostar 90 litros de Shell V. Al contrario que sus contrincantes, que confiaron en motores gasolina y tuvieron que repostar más a menudo. El público quedó impresionado de lo tranquilo y ecológico que puede llegar a ser un motor deportivo TDI de 650 CV.
Aunque el rodaje del nuevo Audi R10 TDI tuvo lugar solamente 200 días antes de la carrera, el exitoso diesel corrió de una manera fiable, al igual que su predecesor, el R8, que consiguió cinco victorias en Le Mans. La única parada en boxes no programada fue realizada a las 3:47 a.m., cuando el Audi Sport Team Joest decidió sustituir un engranaje de la caja de cambios tras un problema con la quinta marcha.
A pesar de que el cambio de la transmisión completa no está permitido por el reglamento de la carrera, dicha modificación fue realizada por el equipo de Audi Sport Team Joest en menos de 10 minutos, gracias al innovador diseño de la caja de cambios (ya incorporada en el R8). Más de un minuto perdieron Frank Biela, Emanuele Pirro y Marco Werner el domingo por la mañana cuando una de las luces delanteras de su R10 TDI se rompió y tuvo que ser sustituida toda la parte frontal de la carrocería. Aparte de esto, el Audi R10 tuvo una precisión digna de un mecanismo de relojería de precisión.
Biela y Pirro celebraron su cuarta victoria respectiva en Le Mans, después de 2000, 2001 y 2002. Así, se colocan en la cuarta posición dentro de la lista de récords históricos, detrás de Tom Kristensen, Jacky Ickx y Derek Bell. Para Audi, esta ha sido la sexta victoria en Le Mans y la tercera consecutiva. Incluido el éxito del Bentley Speed 8 en 2003, un coche impulsado por un motor FSI desarrollado por Audi Sport, la tecnología de Audi ha sido invencible en Le Mans durante 7 años.
El triunfo de Audi fue completado por Dindo Capello, Tom Kristensen y Allan McNish, que terminaron terceros. El R10 TDI estaba en cabeza al inicio de la carrera cuando los inyectores de los cilindros de la bancada derecha del motor TDI V12 tuvieron que ser sustituidos durante la cuarta hora. Habiendo dejado atrás la decimosexta posición. Capello, Kristensen y McNish volvieron a luchar por el tercer puesto con las vueltas más rápidas en la pista, a pesar de los inconvenientes que se produjeron por la noche y por la mañana del día siguiente. Después de una colisión con un coche GT1, hubo daños en los bajos del vehículo y también en el turbocompresor izquierdo que tuvo que ser cambiado. El número 7 estuvo parado casi una hora en los boxes. Sin embargo, gracias a los mecánicos que llevaron a cabo toda la reparación en tiempo récord, los pilotos pudieron subir al podio.
Después de sus victorias en las 12 Horas de Sebring y en las 24 Horas de Le Mans, el nuevo Audi R10 TDI permanece invicto. El siguiente desafío es esperar al nuevo y revolucionario vehículo TDI. Desde el 15 de julio en adelante, el Equipo de Audi Sport en Norteamérica luchará por el título del campeonato en la American Le Mans Series con dos R10 TDI.
Audi ha escrito un importante capítulo en la historia de la competición automovilística con su histórico triunfo en las 24 Horas de Le Mans. El nuevo Audi R10 TDI se ha convertido en el primer diesel en ganar la carrera automovilística más dura y famosa del mundo. Frente a un récord de 235.000 espectadores, Frank Biela (Alemania), Emanuele Pirro (Italia) y Marco Werner (Alemania) lograron la sexta y la más importante victoria para Audi, hasta el momento. Dindo Capello (Italia) Tom Kristensen (Dinamarca) y Allan McNish (Escocia) también alcanzaron el podio siendo los terceros en la general.
Tanto el público allí presente, como los millones de espectadores de todo el mundo por televisión, pudieron presenciar la impresionante demostración de la tecnología TDI de Audi y con ello, el perfecto funcionamiento de sus modernos motores diesel. Los dos R10 TDI de Audi que compitieron en Le Mans estaban impulsados por un motor TDI de 12 válvulas y 650 CV, lo que convirtió a estos vehículos en los más rápidos y económicos de las 24 Horas.
Durante la carrera, uno de los nuevos coches deportivos diesel de Ingolstadt estuvo constantemente a la cabeza. De hecho, el piloto con récord de victorias en Le Mans, Tom Kristensen, realizó la vuelta más rápida de la carrera en 3m. 31.211s, siendo el primer piloto en completar 16 vueltas con un único depósito de combustible. Audi batió también un nuevo récord de distancia al completar 380 vueltas.
La ventaja en el consumo de combustible del motor del Audi R10 TDI durante las 24 Horas de Le Mans, también fue apreciada por los espectadores. Ya que por regla general, los pilotos de Audi únicamente entraron en boxes cada 14 vueltas para repostar 90 litros de Shell V. Al contrario que sus contrincantes, que confiaron en motores gasolina y tuvieron que repostar más a menudo. El público quedó impresionado de lo tranquilo y ecológico que puede llegar a ser un motor deportivo TDI de 650 CV.
Aunque el rodaje del nuevo Audi R10 TDI tuvo lugar solamente 200 días antes de la carrera, el exitoso diesel corrió de una manera fiable, al igual que su predecesor, el R8, que consiguió cinco victorias en Le Mans. La única parada en boxes no programada fue realizada a las 3:47 a.m., cuando el Audi Sport Team Joest decidió sustituir un engranaje de la caja de cambios tras un problema con la quinta marcha.
A pesar de que el cambio de la transmisión completa no está permitido por el reglamento de la carrera, dicha modificación fue realizada por el equipo de Audi Sport Team Joest en menos de 10 minutos, gracias al innovador diseño de la caja de cambios (ya incorporada en el R8). Más de un minuto perdieron Frank Biela, Emanuele Pirro y Marco Werner el domingo por la mañana cuando una de las luces delanteras de su R10 TDI se rompió y tuvo que ser sustituida toda la parte frontal de la carrocería. Aparte de esto, el Audi R10 tuvo una precisión digna de un mecanismo de relojería de precisión.
Biela y Pirro celebraron su cuarta victoria respectiva en Le Mans, después de 2000, 2001 y 2002. Así, se colocan en la cuarta posición dentro de la lista de récords históricos, detrás de Tom Kristensen, Jacky Ickx y Derek Bell. Para Audi, esta ha sido la sexta victoria en Le Mans y la tercera consecutiva. Incluido el éxito del Bentley Speed 8 en 2003, un coche impulsado por un motor FSI desarrollado por Audi Sport, la tecnología de Audi ha sido invencible en Le Mans durante 7 años.
El triunfo de Audi fue completado por Dindo Capello, Tom Kristensen y Allan McNish, que terminaron terceros. El R10 TDI estaba en cabeza al inicio de la carrera cuando los inyectores de los cilindros de la bancada derecha del motor TDI V12 tuvieron que ser sustituidos durante la cuarta hora. Habiendo dejado atrás la decimosexta posición. Capello, Kristensen y McNish volvieron a luchar por el tercer puesto con las vueltas más rápidas en la pista, a pesar de los inconvenientes que se produjeron por la noche y por la mañana del día siguiente. Después de una colisión con un coche GT1, hubo daños en los bajos del vehículo y también en el turbocompresor izquierdo que tuvo que ser cambiado. El número 7 estuvo parado casi una hora en los boxes. Sin embargo, gracias a los mecánicos que llevaron a cabo toda la reparación en tiempo récord, los pilotos pudieron subir al podio.
Después de sus victorias en las 12 Horas de Sebring y en las 24 Horas de Le Mans, el nuevo Audi R10 TDI permanece invicto. El siguiente desafío es esperar al nuevo y revolucionario vehículo TDI. Desde el 15 de julio en adelante, el Equipo de Audi Sport en Norteamérica luchará por el título del campeonato en la American Le Mans Series con dos R10 TDI.