En España pierden la vida 2,2 motoristas al día. No usar el casco multiplica por tres la probabilidad de morir después de un accidente
En España, cada día mueren 2,2 personas como consecuencia de accidentes en vehículos de dos ruedas. Más de la mitad de los accidentados en moto o ciclomotor sufren lesiones en la cabeza. Por este motivo, el casco es imprescindible para evitar consecuencias graves derivadas de un accidente. Las investigaciones realizadas por el RACC han demostrado que su uso puede reducir las muertes en un tercio y evitar dos de cada tres lesiones cerebrales. El RACC, mayor automóvil club de España, con más de un millón de socios, preocupado por la seguridad de los conductores y sus familias y difusor de valores de educación vial, ha participado en un estudio europeo sobre el nivel de protección y seguridad que ofrecen los cascos a los usuarios.
El RACC ha elaborado, en colaboración con el ADAC, Automóvil Club Alemán, un estudio sobre el nivel de protección y seguridad que ofrecen al usuario diversos cascos presentes en el mercado europeo. En general, las pruebas realizadas con los cascos integrales dieron resultados buenos y/o satisfactorios. Sólo los cascos con una valoración "muy recomendable" obtuvieron resultados correctos en todos los criterios del ensayo. De los ocho cascos sometidos a prueba, dos modelos son considerados "muy recomendables", cuatro como "recomendables" y dos como "recomendables con limitaciones". Todos los cascos estudiados se pueden encontrar sin dificultad en el mercado español.
CONSEJOS SOBRE EL USO DEL CASCO
Es recomendable utilizar cascos integrales antes que cascos tipo Jet, que dejan al descubierto la cara del motorista. Las ventajas del primero respecto al casco tipo Jet son claras:
1. Evitan lesiones faciales superficiales en una hipotética rozadura contra el suelo.
2. Protegen de un posible traumatismo facial, tan mortal como un traumatismo craneal.
3. Protegen los ojos de la acción de miles de partículas que flotan en el aire y que impactan sobre la córnea de los motoristas. A la larga, puede acarrear una visión defectuosa.
Por otra parte, los cascos preferiblemente deben ser de colores vivos y claros, y se tienen que combinar, en la medida de lo posible, con otros materiales reflectantes. El casco deberá ajustarse perfectamente a la cabeza. La talla del casco debe ser un poco más pequeña que la medida de la cabeza, ya que con el tiempo, el interior del casco se comprime y puede llegar a resultar demasiado grande. Una vez cerrada la hebilla de seguridad, el casco no se debe poder sacar, ni siquiera tirando con fuerza. Las personas que utilicen gafas deben comprobar que se ajusten con el casco puesto. Es recomendable probar el casco antes de comprarlo, a fin de comprobar determinadas propiedades, como si aísla en exceso de los sonidos o permite una correcta visibilidad. Se debe comprobar que hay suficiente ventilación con la visera bajada. En caso que no haya una correcta resistencia al vaho, se pueden solicitar versiones especiales de la visera o aplicar una capa especial a la visera para mejorar este aspecto.
En España, cada día mueren 2,2 personas como consecuencia de accidentes en vehículos de dos ruedas. Más de la mitad de los accidentados en moto o ciclomotor sufren lesiones en la cabeza. Por este motivo, el casco es imprescindible para evitar consecuencias graves derivadas de un accidente. Las investigaciones realizadas por el RACC han demostrado que su uso puede reducir las muertes en un tercio y evitar dos de cada tres lesiones cerebrales. El RACC, mayor automóvil club de España, con más de un millón de socios, preocupado por la seguridad de los conductores y sus familias y difusor de valores de educación vial, ha participado en un estudio europeo sobre el nivel de protección y seguridad que ofrecen los cascos a los usuarios.
El RACC ha elaborado, en colaboración con el ADAC, Automóvil Club Alemán, un estudio sobre el nivel de protección y seguridad que ofrecen al usuario diversos cascos presentes en el mercado europeo. En general, las pruebas realizadas con los cascos integrales dieron resultados buenos y/o satisfactorios. Sólo los cascos con una valoración "muy recomendable" obtuvieron resultados correctos en todos los criterios del ensayo. De los ocho cascos sometidos a prueba, dos modelos son considerados "muy recomendables", cuatro como "recomendables" y dos como "recomendables con limitaciones". Todos los cascos estudiados se pueden encontrar sin dificultad en el mercado español.
CONSEJOS SOBRE EL USO DEL CASCO
Es recomendable utilizar cascos integrales antes que cascos tipo Jet, que dejan al descubierto la cara del motorista. Las ventajas del primero respecto al casco tipo Jet son claras:
1. Evitan lesiones faciales superficiales en una hipotética rozadura contra el suelo.
2. Protegen de un posible traumatismo facial, tan mortal como un traumatismo craneal.
3. Protegen los ojos de la acción de miles de partículas que flotan en el aire y que impactan sobre la córnea de los motoristas. A la larga, puede acarrear una visión defectuosa.
Por otra parte, los cascos preferiblemente deben ser de colores vivos y claros, y se tienen que combinar, en la medida de lo posible, con otros materiales reflectantes. El casco deberá ajustarse perfectamente a la cabeza. La talla del casco debe ser un poco más pequeña que la medida de la cabeza, ya que con el tiempo, el interior del casco se comprime y puede llegar a resultar demasiado grande. Una vez cerrada la hebilla de seguridad, el casco no se debe poder sacar, ni siquiera tirando con fuerza. Las personas que utilicen gafas deben comprobar que se ajusten con el casco puesto. Es recomendable probar el casco antes de comprarlo, a fin de comprobar determinadas propiedades, como si aísla en exceso de los sonidos o permite una correcta visibilidad. Se debe comprobar que hay suficiente ventilación con la visera bajada. En caso que no haya una correcta resistencia al vaho, se pueden solicitar versiones especiales de la visera o aplicar una capa especial a la visera para mejorar este aspecto.