El Instituto de Seguridad Vial de FUNDACIÓN MAPFRE y el Cuerpo de Movilidad del Ayuntamiento de Madrid presentaron ayer en rueda de prensa el informe Velocidad de circulación en zonas escolares urbanas, un estudio que ha evaluado la velocidad de los vehículos en dichas zonas a través de unos nuevos radares, y ha identificado los comportamientos de riesgo más comunes en estos emplazamientos urbanos.
Además, se ha comprobado el estado de la señalización y de los pasos de peatones. La publicación del informe ha contado con el apoyo de la Oficina del Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid.
El estudio está basado en un trabajo de campo realizado en las proximidades de zonas escolares de 14 emplazamientos urbanos de Madrid. De los 10.681 vehículos controlados, 1.531 (un 14,3 por ciento) superaban la velocidad permitida y 729 (un 6,8 por ciento del total de vehículos controlados) habrían sido objeto de sanción. Además, para un total de 35 conductores el exceso de velocidad hubiera supuesto pérdida de puntos de su permiso de conducir (31 habrían perdido dos puntos y los otros cuatro hubieran perdido hasta seis).
Por otro lado, las jornadas de estudio han servido para analizar los comportamientos más comunes que pueden provocar incidentes en la vía como son no utilizar el paso de peatones, no respetar los semáforos, cruzar por delante o detrás del autobús, sobrepasar la velocidad, etc. En este sentido, hay que señalar que se han detectado conductas de lato riesgo en el colectivo de los peatones que ponen en peligro la circulación.
Para realizar el trabajo de campo los agentes de movilidad del Ayuntamiento de Madrid han utilizado unos nuevos equipos de medición que están en funcionamiento a partir de hoy. Se trata de radares móviles, fácilmente transportables y especialmente diseñados para calles estrechas, zonas residenciales, alrededores de colegios, zonas de alta ocupación peatonal, etc.
Las principales conclusiones que recoge el informe Velocidad de circulación en zonas escolares urbanas son:
Un 14,3 por ciento de los vehículos controlados en zonas escolares circula por encima del límite de velocidad establecido. El 6,8 por ciento rebasa el límite lo suficiente como para ser sancionado.
Durante el estudio se produjeron 31 situaciones que hubieran supuesto la pérdida de 2 puntos y 4 con pérdida de 6 puntos.
El índice de infracciones aumenta en las zonas con limitación específica a 40 km/h.
En las zonas con limitación de velocidad genérica el número de infractores sube si la vía tiene más de dos carriles.
En vías estrechas y de un único sentido apenas se registran excesos de velocidad.
No se aprecian variaciones significativas en las velocidades de circulación registradas en horario de entrada y salida de los colegios respecto a cualquier otro momento del día.
Se han detectado conductas de alto riesgo en el colectivo de peatones que ponen en peligro la circulación.
La falta de respeto hacia los pasos de peatones, límites de velocidad y semáforos son las principales infracciones de los conductores.
Además, se ha comprobado el estado de la señalización y de los pasos de peatones. La publicación del informe ha contado con el apoyo de la Oficina del Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid.
El estudio está basado en un trabajo de campo realizado en las proximidades de zonas escolares de 14 emplazamientos urbanos de Madrid. De los 10.681 vehículos controlados, 1.531 (un 14,3 por ciento) superaban la velocidad permitida y 729 (un 6,8 por ciento del total de vehículos controlados) habrían sido objeto de sanción. Además, para un total de 35 conductores el exceso de velocidad hubiera supuesto pérdida de puntos de su permiso de conducir (31 habrían perdido dos puntos y los otros cuatro hubieran perdido hasta seis).
Por otro lado, las jornadas de estudio han servido para analizar los comportamientos más comunes que pueden provocar incidentes en la vía como son no utilizar el paso de peatones, no respetar los semáforos, cruzar por delante o detrás del autobús, sobrepasar la velocidad, etc. En este sentido, hay que señalar que se han detectado conductas de lato riesgo en el colectivo de los peatones que ponen en peligro la circulación.
Para realizar el trabajo de campo los agentes de movilidad del Ayuntamiento de Madrid han utilizado unos nuevos equipos de medición que están en funcionamiento a partir de hoy. Se trata de radares móviles, fácilmente transportables y especialmente diseñados para calles estrechas, zonas residenciales, alrededores de colegios, zonas de alta ocupación peatonal, etc.
Las principales conclusiones que recoge el informe Velocidad de circulación en zonas escolares urbanas son:
Un 14,3 por ciento de los vehículos controlados en zonas escolares circula por encima del límite de velocidad establecido. El 6,8 por ciento rebasa el límite lo suficiente como para ser sancionado.
Durante el estudio se produjeron 31 situaciones que hubieran supuesto la pérdida de 2 puntos y 4 con pérdida de 6 puntos.
El índice de infracciones aumenta en las zonas con limitación específica a 40 km/h.
En las zonas con limitación de velocidad genérica el número de infractores sube si la vía tiene más de dos carriles.
En vías estrechas y de un único sentido apenas se registran excesos de velocidad.
No se aprecian variaciones significativas en las velocidades de circulación registradas en horario de entrada y salida de los colegios respecto a cualquier otro momento del día.
Se han detectado conductas de alto riesgo en el colectivo de peatones que ponen en peligro la circulación.
La falta de respeto hacia los pasos de peatones, límites de velocidad y semáforos son las principales infracciones de los conductores.