El lanzamiento del Grande Punto Abarth es un homenaje a todos los pequeños Fiat del pasado que el “toque” mágico de Abarth convirtió en aguerridos, dinámicos y deportivos: verdaderos “escorpiones” capaces de estimular la pasión por el desafío, la velocidad y el estilo italiano de miles de automovilistas.
Hoy, el Grande Punto Abarth quiere hacer renacer el esplendor de aquellos vehículos ofreciendo la posibilidad, sobre todo a los jóvenes, de ingresar al mundo de la competición deportiva disfrutando de una total seguridad y a un precio accesible.
El Grande Punto Abarth está equipado con un motor de 1.4 gasolina turbo de 155 CV. Combinado con un cambio mecánico de 6 marchas, el propulsor permite que el vehículo alcance una velocidad máxima de 208 km/h y que acelere de 0 a 100 km/h en apenas 8,2 segundos. Además de ser un pequeño muestrario de prestaciones, el Grande Punto Abarth es un vehículo seguro y que respeta el medio ambiente. Seguro porque la modificación sufrida no se limita sólo al motor y a la aerodinámica: las dimensiones de los frenos y el equilibrio del vehículo han sido rediseñados en función del aumento de prestaciones. Decimos que respeta el medio ambiente porque, a pesar de tener muchos más caballos del modelo original, respeta las mismas normativas acerca del nivel de ruidos y de las emisiones de gases (motor homologado Euro 4).
Con respecto a la producción normal, se caracteriza por tener 6 mm. más de rodada, llantas de aleación de 17” y bandas laterales rojas con la inscripción Abarth. Además, el parachoques delantero es específico e incluye los faros de profundidad, engarzados en casquetes negros, mientras que las tomas de aire han sido adaptadas a las exigencias de refrigeración del nuevo motor y por lo tanto agrandadas con un diseño exclusivo Abarth. Y por último los faldones laterales, los manguitos pasarruedas y el fondo del chasis de plástico negro, conforman un carenado completo de la parte inferior, perfilado para aumentar el rendimiento aerodinámico, que llega hasta el parachoques trasero ahusado. Obviamente en el vehículo resalta la marca Abarth, ubicada en el centro de la parte frontal, en la puerta trasera y también en ambos lados, a la altura de la manilla.
Han sido mejoradas sobre todo las prestaciones del vehículo, modificando el motopropulsor, los frenos y la alineación. El motor es un 4 cilindros de 16 válvulas de 1.368 cm3 (sobrealimentado con un turbo IHI de geometría fija) que ofrece 155 CV a 5.500 rpm y un par máximo de 206 Nm a 5.000 rpm. Además, activando la modalidad “power boost”, el par máximo alcanza 230 Nm a 3000 rpm (nada menos que un 10% más) y la conducción, con servomecanismo eléctrico, modifica el calibrado aumentando la carga para alcanzar características más deportivas. Los frenos son a disco en todas las ruedas, los delanteros se ventilan con pinza fija Brembo de doble pistón.
Las suspensiones derivan del esquema probado del Fiat Grande Punto (suspensión delantera Mc Pherson y barra estabilizadora, suspensión trasera de puente de torsión) oportunamente revisado: la barra estabilizadora ha sido mejorada (diámetro 19 mm), los muelles delanteros son un 20% más rígidos y las suspensiones han sido rebajadas 10 mm. Con estas modificaciones, el vehículo garantiza una impecable adherencia en carretera manteniendo un elevado nivel de confort. Y para confirmar la importancia otorgada a la seguridad en el diseño de este vehículo (pensado especialmente para los jóvenes), el ESP es de serie y no puede ser desactivado.
También en el interior del vehículo se hace evidente la personalización Abarth: por ejemplo, en un extremo del tablero se destaca el escorpión y la consola central “efecto carbono” está decorada con un motivo de cubos en relieve. Además: los instrumentos asumen un diseño deportivo, lo mismo para el volante y el pomo del cambio marcha, ambos revestidos de cuero negro con costuras rojas. No menos importancia revisten los asientos, que son muy refinados, con apoya cabeza integrado, soporte lumbar y dos “alas” para el sostén lateral de los muslos (el tapizado de los asientos y de la parte central del tablero puede ser de cuero, a pedido).
Hoy, el Grande Punto Abarth quiere hacer renacer el esplendor de aquellos vehículos ofreciendo la posibilidad, sobre todo a los jóvenes, de ingresar al mundo de la competición deportiva disfrutando de una total seguridad y a un precio accesible.
El Grande Punto Abarth está equipado con un motor de 1.4 gasolina turbo de 155 CV. Combinado con un cambio mecánico de 6 marchas, el propulsor permite que el vehículo alcance una velocidad máxima de 208 km/h y que acelere de 0 a 100 km/h en apenas 8,2 segundos. Además de ser un pequeño muestrario de prestaciones, el Grande Punto Abarth es un vehículo seguro y que respeta el medio ambiente. Seguro porque la modificación sufrida no se limita sólo al motor y a la aerodinámica: las dimensiones de los frenos y el equilibrio del vehículo han sido rediseñados en función del aumento de prestaciones. Decimos que respeta el medio ambiente porque, a pesar de tener muchos más caballos del modelo original, respeta las mismas normativas acerca del nivel de ruidos y de las emisiones de gases (motor homologado Euro 4).
Con respecto a la producción normal, se caracteriza por tener 6 mm. más de rodada, llantas de aleación de 17” y bandas laterales rojas con la inscripción Abarth. Además, el parachoques delantero es específico e incluye los faros de profundidad, engarzados en casquetes negros, mientras que las tomas de aire han sido adaptadas a las exigencias de refrigeración del nuevo motor y por lo tanto agrandadas con un diseño exclusivo Abarth. Y por último los faldones laterales, los manguitos pasarruedas y el fondo del chasis de plástico negro, conforman un carenado completo de la parte inferior, perfilado para aumentar el rendimiento aerodinámico, que llega hasta el parachoques trasero ahusado. Obviamente en el vehículo resalta la marca Abarth, ubicada en el centro de la parte frontal, en la puerta trasera y también en ambos lados, a la altura de la manilla.
Han sido mejoradas sobre todo las prestaciones del vehículo, modificando el motopropulsor, los frenos y la alineación. El motor es un 4 cilindros de 16 válvulas de 1.368 cm3 (sobrealimentado con un turbo IHI de geometría fija) que ofrece 155 CV a 5.500 rpm y un par máximo de 206 Nm a 5.000 rpm. Además, activando la modalidad “power boost”, el par máximo alcanza 230 Nm a 3000 rpm (nada menos que un 10% más) y la conducción, con servomecanismo eléctrico, modifica el calibrado aumentando la carga para alcanzar características más deportivas. Los frenos son a disco en todas las ruedas, los delanteros se ventilan con pinza fija Brembo de doble pistón.
Las suspensiones derivan del esquema probado del Fiat Grande Punto (suspensión delantera Mc Pherson y barra estabilizadora, suspensión trasera de puente de torsión) oportunamente revisado: la barra estabilizadora ha sido mejorada (diámetro 19 mm), los muelles delanteros son un 20% más rígidos y las suspensiones han sido rebajadas 10 mm. Con estas modificaciones, el vehículo garantiza una impecable adherencia en carretera manteniendo un elevado nivel de confort. Y para confirmar la importancia otorgada a la seguridad en el diseño de este vehículo (pensado especialmente para los jóvenes), el ESP es de serie y no puede ser desactivado.
También en el interior del vehículo se hace evidente la personalización Abarth: por ejemplo, en un extremo del tablero se destaca el escorpión y la consola central “efecto carbono” está decorada con un motivo de cubos en relieve. Además: los instrumentos asumen un diseño deportivo, lo mismo para el volante y el pomo del cambio marcha, ambos revestidos de cuero negro con costuras rojas. No menos importancia revisten los asientos, que son muy refinados, con apoya cabeza integrado, soporte lumbar y dos “alas” para el sostén lateral de los muslos (el tapizado de los asientos y de la parte central del tablero puede ser de cuero, a pedido).