Porsche AG ha logrado un nuevo récord de ventas y facturación en el ejercicio fiscal 2006/2007, que terminó el pasado 31 de julio, a pesar de que en este periodo se produjo el cambio hacia una nueva generación del modelo Cayenne. Tal y como anunció el Grupo en el Salón del Automóvil de Frankfurt, los datos provisionales muestran un aumento en las ventas de vehículos Porsche de un 0,7%, hasta llegar a las 97.515 unidades, frente a las 96.794 del año anterior. Al mismo tiempo, la facturación creció un 3,4% y se situó en los 7.400 millones de euros. En el ejercicio previo, excluyendo los ingresos por la venta de CTS Car Top Systems GmbH, los ingresos fueron de 7.100 millones de euros. Una notable mejora en la gama de productos es la principal responsable de estas buenas cifras. Gracias a un aumento del 8,8%, el 911 logra su propio récord de ventas con 37.415 vehículos (34.386 el año anterior), lo que le convierte en el modelo de más éxito del Grupo en el ejercicio que se está revisando. El 911 GT3 y el 911 Targa contribuyeron a ese éxito, igual que, por supuesto, el nuevo 911 Turbo, que estrenaba su primer año fiscal completo en el mercado.
La marcha del deportivo SUV Cayenne fue particularmente gratificante, considerando que el modelo fue cambiado en medio de este periodo y, así, mientras que la producción de la primera generación cesó en noviembre de 2006, el nuevo Cayenne no llegó al mercado hasta finales de febrero de 2007. Aunque eso significa que durante tres meses el vehículo no estuvo disponible, por lo que las ventas totales han sido de 33.943 unidades, prácticamente lo mismo que en el ejercicio precedente (34.134 unidades). Con ello se demuestra que el Cayenne ha tenido un magnífico recibimiento por parte de los clientes.
En el complicado segmento de los roadster, que en algunos mercados incluso vio como se desplomaban las ventas, la serie Boxster mantuvo su nivel. El Cayman pudo compensar con su mejora la caída del modelo Boxster, de manera que las 26.146 unidades entregadas en total no quedan lejos de las 27.906 del ejercicio previo. Las ventas de Porsche incluyen también dos RS Spyder, ya que el Grupo decidió en 2006 construir estos vehículos de competición de un millón de euros, para que equipos privados pudieran disponer de ellos en la American Le Mans Series, dentro de la categoría LMP2.
El nuevo incremento de ventas en el ejercicio 2006/2007 fue logrado a pesar de la fuerte competencia en los mercados internacionales, que tuvieron desarrollos muy diferentes. Por ejemplo, el fabricante de vehículos deportivos premium vio como se reducían en un 10,3% sus ventas en Norteamérica, donde alcanzó las 33.576 unidades entregadas, frente a las 37.431 del año anterior. Sin embargo, Porsche se mantuvo fiel a su política de no hacer descuentos. En cambio, en Alemania las ventas crecieron un 2,8%, hasta los 14.314 coches (13.921 el ejercicio anterior). Al margen de estos dos mercados, los más grandes para Porsche, la marca logró un aumento del 9,2% en sus ventas, con 49.625 unidades, frente a las 45.442 del año anterior. Esta tendencia estuvo liderada principalmente por los mercados emergentes como China y Rusia.
La marcha del deportivo SUV Cayenne fue particularmente gratificante, considerando que el modelo fue cambiado en medio de este periodo y, así, mientras que la producción de la primera generación cesó en noviembre de 2006, el nuevo Cayenne no llegó al mercado hasta finales de febrero de 2007. Aunque eso significa que durante tres meses el vehículo no estuvo disponible, por lo que las ventas totales han sido de 33.943 unidades, prácticamente lo mismo que en el ejercicio precedente (34.134 unidades). Con ello se demuestra que el Cayenne ha tenido un magnífico recibimiento por parte de los clientes.
En el complicado segmento de los roadster, que en algunos mercados incluso vio como se desplomaban las ventas, la serie Boxster mantuvo su nivel. El Cayman pudo compensar con su mejora la caída del modelo Boxster, de manera que las 26.146 unidades entregadas en total no quedan lejos de las 27.906 del ejercicio previo. Las ventas de Porsche incluyen también dos RS Spyder, ya que el Grupo decidió en 2006 construir estos vehículos de competición de un millón de euros, para que equipos privados pudieran disponer de ellos en la American Le Mans Series, dentro de la categoría LMP2.
El nuevo incremento de ventas en el ejercicio 2006/2007 fue logrado a pesar de la fuerte competencia en los mercados internacionales, que tuvieron desarrollos muy diferentes. Por ejemplo, el fabricante de vehículos deportivos premium vio como se reducían en un 10,3% sus ventas en Norteamérica, donde alcanzó las 33.576 unidades entregadas, frente a las 37.431 del año anterior. Sin embargo, Porsche se mantuvo fiel a su política de no hacer descuentos. En cambio, en Alemania las ventas crecieron un 2,8%, hasta los 14.314 coches (13.921 el ejercicio anterior). Al margen de estos dos mercados, los más grandes para Porsche, la marca logró un aumento del 9,2% en sus ventas, con 49.625 unidades, frente a las 45.442 del año anterior. Esta tendencia estuvo liderada principalmente por los mercados emergentes como China y Rusia.