El nuevo Bugatti Vieron, un modelo de 1001 caballos y velocidad punta de 401 km/h equipado con frenos de disco cerámicos, es el último vehículo en contar con las pastillas de freno TMD para completar su equipamiento.
Hasta el momento, los sistemas de freno de disco cerámico han sido incluidos en los vehículos tras un desembolso extra de dinero. Como contrapartida a su elevado precio, los fabricantes ofrecen productos que, con una vida media de 300.000 km, disponen de unas excepcionales capacidades de frenado que dotan a la conducción de un confort adicional.
El motivo de que fabricantes de automóviles de tan alto rendimiento se decanten por frenos de disco cerámicos es su menor peso –son un 55% más ligeros- y una menor capacidad termal y conductividad, lo que supone que alcanzan menor temperatura durante la fricción, algo que la pastilla debe absorber para mantener constantes las características de la frenada.
Por ello, en TMD se trabaja en “el desarrollo de nuevas recetas y sistemas de vinculación entre elementos que permitan cumplir” con tan particulares requisitos, algo a lo que ayudan los “años de experiencia en el desarrollo de automóviles y coches de carrera” de la compañía, asevera Ludwig Revenís, Group Executive R&D; y Customer Programes en TMD Friction.
El trabajo junto a fabricantes de frenos y automóviles hace posible el desarrollo de frenos que alcanzan un coeficiente constante de fricción de µ=0,45 y el comportamiento deseado en cada momento sin pérdidas de comodidad, es decir, sin percibir incrementos de la vibración del volante.
TMD se asegura del cumplimiento de estas propiedades mediante pruebas realizadas tanto en su centro de desarrollo de Leverkusen como en carreteras y circuitos de todo el mundo, donde los frenos se someten a estrictos exámenes.
La colaboración de la marca con BT Bremsem Tecknick, relación que comienza en 1998, ha llevado a TMD a proporcionar pastillas de freno para modelos como el AMG SLR McLaren de Mercedes-Benz; distintos modelos Porsche como el GT 3, el Carrera GT, el 996 GT 2 o el 996 Turbo o para varios modelos Ferrari. Igualmente, los compradores del Porsche Boxter pueden optar por modelos con frenos de disco cerámicos equipados con pastillas TMD.
Los últimos en sumarse a esta lista son el Audi A8 W12 y el Lamborghini L 147 GTT.
Hasta el momento, los sistemas de freno de disco cerámico han sido incluidos en los vehículos tras un desembolso extra de dinero. Como contrapartida a su elevado precio, los fabricantes ofrecen productos que, con una vida media de 300.000 km, disponen de unas excepcionales capacidades de frenado que dotan a la conducción de un confort adicional.
El motivo de que fabricantes de automóviles de tan alto rendimiento se decanten por frenos de disco cerámicos es su menor peso –son un 55% más ligeros- y una menor capacidad termal y conductividad, lo que supone que alcanzan menor temperatura durante la fricción, algo que la pastilla debe absorber para mantener constantes las características de la frenada.
Por ello, en TMD se trabaja en “el desarrollo de nuevas recetas y sistemas de vinculación entre elementos que permitan cumplir” con tan particulares requisitos, algo a lo que ayudan los “años de experiencia en el desarrollo de automóviles y coches de carrera” de la compañía, asevera Ludwig Revenís, Group Executive R&D; y Customer Programes en TMD Friction.
El trabajo junto a fabricantes de frenos y automóviles hace posible el desarrollo de frenos que alcanzan un coeficiente constante de fricción de µ=0,45 y el comportamiento deseado en cada momento sin pérdidas de comodidad, es decir, sin percibir incrementos de la vibración del volante.
TMD se asegura del cumplimiento de estas propiedades mediante pruebas realizadas tanto en su centro de desarrollo de Leverkusen como en carreteras y circuitos de todo el mundo, donde los frenos se someten a estrictos exámenes.
La colaboración de la marca con BT Bremsem Tecknick, relación que comienza en 1998, ha llevado a TMD a proporcionar pastillas de freno para modelos como el AMG SLR McLaren de Mercedes-Benz; distintos modelos Porsche como el GT 3, el Carrera GT, el 996 GT 2 o el 996 Turbo o para varios modelos Ferrari. Igualmente, los compradores del Porsche Boxter pueden optar por modelos con frenos de disco cerámicos equipados con pastillas TMD.
Los últimos en sumarse a esta lista son el Audi A8 W12 y el Lamborghini L 147 GTT.