A falta de las cifras definitivas, el BARCELONA TUNING SHOW cerró ayer sus puertas con más de 75.0000 visitantes y tras haber celebrado su edición más festiva. La música, los espectáculos y los más de 200 coches tuneados expuestos convirtieron el palacio 8 de Montjuïc en la gran fiesta del tuning. Las largas colas registradas el sábado y durante la mañana del domingo en la taquilla de Plaza España consolidan el BARCELONA TUNING SHOW como el salón más importante de tuning en España y demuestran el éxito e interés que el tuning ha adquirido no sólo entre los aficionados sino entre el público general, según fuentes de Fira de Barcelona.
En el salón han participado más de 300 firmas, en su mayoría nacionales pero entre las que también había expositores procedentes de Portugal, Francia, Gran Bretaña y Alemania. Organizado por Fira de Barcelona y el grupo MotorPress Ibérica, el salón presentó como novedad la exposición Motor Show, una de las áreas con más éxito del salón en la que se mostraron una veintena de coches americanos entre los que había réplicas de coches como el de la serie Starsky & Hutch. Además se expusieron motocicletas, con espectaculares modelos como una moto que incorporaba piezas bañadas en oro, cristales de Swarovsky y tapicería de Louis Vuitton.
El espacio Top 100, con los cien mejores coches tuneados de España, se convirtió en otra de las áreas más visitadas. Las preparaciones eran muy creativas y originales y demostraron no sólo que el tuning tiene cada vez más seguidores sino que la mayoría de ellos han alcanzado niveles de calidad y profesionalidad muy elevados. Por ello se presentó también en el salón la primera escuela profesional de tuning que se ha creado en España, la Kustom School Garage, que recibió muchas solicitudes de información.
Para cerrar el salón, se sorteó entre los visitantes un coche tuneado, un Daimler Jaguar XJ40 customizado con el estilo dub, expresión del lujo y la elegancia.
En el salón han participado más de 300 firmas, en su mayoría nacionales pero entre las que también había expositores procedentes de Portugal, Francia, Gran Bretaña y Alemania. Organizado por Fira de Barcelona y el grupo MotorPress Ibérica, el salón presentó como novedad la exposición Motor Show, una de las áreas con más éxito del salón en la que se mostraron una veintena de coches americanos entre los que había réplicas de coches como el de la serie Starsky & Hutch. Además se expusieron motocicletas, con espectaculares modelos como una moto que incorporaba piezas bañadas en oro, cristales de Swarovsky y tapicería de Louis Vuitton.
El espacio Top 100, con los cien mejores coches tuneados de España, se convirtió en otra de las áreas más visitadas. Las preparaciones eran muy creativas y originales y demostraron no sólo que el tuning tiene cada vez más seguidores sino que la mayoría de ellos han alcanzado niveles de calidad y profesionalidad muy elevados. Por ello se presentó también en el salón la primera escuela profesional de tuning que se ha creado en España, la Kustom School Garage, que recibió muchas solicitudes de información.
Para cerrar el salón, se sorteó entre los visitantes un coche tuneado, un Daimler Jaguar XJ40 customizado con el estilo dub, expresión del lujo y la elegancia.
