Así lo aseguró ayerel director general de Anfac, Luis Valero, quien explicó que el crecimiento de las ventas de automóviles registrado en diciembre pasado es consecuencia de la distorsión provocada por la entrada en vigor el 1 de enero del nuevo impuesto de matriculación, ligado a las emisiones de CO2.
Ante esta reforma fiscal, en diciembre crecieron las ventas de vehículos que pagarán más impuestos, como todoterrenos, con un alza del 40%, y de automóviles de gama alta. Además, se registró un elevado número de automatriculaciones, principalmente de los vehículos que soportarán un mayor gravamen, según Valero.
En todo caso, el responsable de Anfac cree que el comportamiento del mercado en el conjunto de 2007 fue "razonable, dentro de lo previsto", siguiendo con la tendencia de suave retroceso de las matriculaciones. Asimismo, destacó la positiva evolución de la producción, que cerró el año recién concluido con una cifra cercana a los tres millones de vehículos.
Valero avanzó que en 2008 las ventas de automóviles se comportarán de forma parecida a 2007, con un pequeño descenso de entre el 1% y el 2%, si bien en los primeros meses del año es posible que la nueva fiscalidad haga crecer las ventas de los coches que pagarán menos impuestos y que suponen en torno al 70% del total.
Por último, el director general de la asociación de fabricantes lamentó la supresión definitiva del Plan Prever que, a su juicio, ha sido "muy eficaz" durante sus diez años de aplicación, contribuyendo a mejoras en los ámbitos del medio ambiente y de la seguridad vial.