Al igual que pasó con el presupuesto para el plus de productividad, la Guardia Civil también ha agotado la partida destinada a la reparación de vehículos oficiales, exceptuando los del Subsector de Tráfico. A principios de noviembre, la Dirección General envió instrucciones a todas las unidades para que cuando un vehículo se averíe quede inmovilizado hasta que se libren los presupuestos correspondientes al año 2005.
Esta situación, explica el Diario de Córdoba, se ha generalizado en esta provincia andaluza, y sus consecuencias empiezan a detectarse en los pueblos. La Vega del Guadalquivir es una de las más afectadas. Desde hace casi un mes están averiados e inmovilizados los tres vehículos con los que cuenta el cuartelillo de Almodóvar del Río y desde el 7 de noviembre los agentes patrullan en un automóvil prestado por el destacamento de Fuente Palmera, en detrimento de esta última unidad.
El problema añadido es que en Almodóvar se prestan servicios de patrulla las 24 horas del día, realizando una media de 400 kilómetros diarios, soportados por un único coche, lo que eleva el riesgo de avería.
En Posadas, el caso se vuelve a repetir. Los guardias civiles destinados en esa localidad patrullan en un vehículo prestado, pues los dos con que cuenta este cuartel están parados en la cochera desde noviembre a la espera de una reparación.
También en Rute hay otro par de automóviles inmovilizados, uno de ellos desde hace más de seis meses. Los agentes realizan sus servicios en un vehículo que registra en su marcador más de 200.000 kilómetros y en otro que se lo han prestado en Priego. Igual pasa en El Carpio y Villafranca, con coches parados por el deterioro de los neumáticos y utilizando otros de destacamentos cercanos.
De los tres vehículos adjudicados al puesto de Cerro Muriano, sólo dos están disponibles, pues el tercero fue retirado hace tiempo y está propuesto para que se le dé la baja definitiva. Uno de los que queda disponible viene siendo utilizado por los compañeros de las unidades de Posadas y Almodóvar del Río.
Esta situación, explica el Diario de Córdoba, se ha generalizado en esta provincia andaluza, y sus consecuencias empiezan a detectarse en los pueblos. La Vega del Guadalquivir es una de las más afectadas. Desde hace casi un mes están averiados e inmovilizados los tres vehículos con los que cuenta el cuartelillo de Almodóvar del Río y desde el 7 de noviembre los agentes patrullan en un automóvil prestado por el destacamento de Fuente Palmera, en detrimento de esta última unidad.
El problema añadido es que en Almodóvar se prestan servicios de patrulla las 24 horas del día, realizando una media de 400 kilómetros diarios, soportados por un único coche, lo que eleva el riesgo de avería.
En Posadas, el caso se vuelve a repetir. Los guardias civiles destinados en esa localidad patrullan en un vehículo prestado, pues los dos con que cuenta este cuartel están parados en la cochera desde noviembre a la espera de una reparación.
También en Rute hay otro par de automóviles inmovilizados, uno de ellos desde hace más de seis meses. Los agentes realizan sus servicios en un vehículo que registra en su marcador más de 200.000 kilómetros y en otro que se lo han prestado en Priego. Igual pasa en El Carpio y Villafranca, con coches parados por el deterioro de los neumáticos y utilizando otros de destacamentos cercanos.
De los tres vehículos adjudicados al puesto de Cerro Muriano, sólo dos están disponibles, pues el tercero fue retirado hace tiempo y está propuesto para que se le dé la baja definitiva. Uno de los que queda disponible viene siendo utilizado por los compañeros de las unidades de Posadas y Almodóvar del Río.
