La Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (FACONAUTO) estima que la crisis del sector inmobiliario está lastrando las matriculaciones de turismos y todoterrenos, principalmente, en aquellas provincias costeras que han sido destino de importantes inversiones por parte de promotores y constructores animados en estos últimos años por una coyuntura económica favorable y un turismo en alza.
De esta forma, la patronal de los concesionarios explica que la caída de las ventas de automóviles no está afectando a todas las regiones por igual, sino que está castigando con mayor virulencia a aquellas provincias afectadas por la “crisis del ladrillo” donde el parón inmobiliario está conduciendo a múltiples despidos, así como a un frenazo del consumo.
Así, la caída media del 27,4% experimentada por las ventas de turismos y todoterrenos en el mes de julio tuvo su reflejo más acusado en aquellas provincias ubicadas en la costa mediterránea donde si bien la especulación inmobiliaria encontró su refugio más rentable en estos últimos años, el brusco ajuste del sector constructor está haciendo mayores estragos sobre la actividad económica.
Baleares, Castellón y Murcia, a la cabeza
De esta forma, las Islas Baleares, con 2.329 unidades matriculadas, es la comunidad autónoma que experimentó un mayor retroceso de las ventas en julio, con una caída del 53,7%, seguida de Castellón, con un descenso del 47,3% y 1.108 unidades matriculadas.
La Región de Murcia ocupa la tercera posición en caída de ventas, con una bajada del 43,5% y 2.619 vehículos vendidos, por delante de Valencia que, con un retroceso del 39,3%, se sitúa como la cuarta provincia con mayor caída. También en el arco mediterráneo, las provincias de Almería y Granada protagonizaron una bajada de las ventas del 37,5% y 36,9% en julio, ocupando así la quinta y sexta posición de este ranking, respectivamente.
Como excepción, la localidad de Alicante fue la única provincia española que experimentó un crecimiento de las ventas de automóviles durante el pasado mes de julio, con una subida del 15%. Asimismo, llama la atención igualmente el comportamiento de las ventas de coches en Málaga -escenario de la operación Malaya- donde cayeron un 18%, por debajo de la media nacional y del resto de provincias costeras analizadas. Otras costas
Por su parte, el Archipiélago Canario también registró uno de los descensos en ventas más acusados. Así, las matriculaciones de turismos y todoterrenos en Las Palmas cayeron un 35%, mientras que en Santa Cruz de Tenerife esta bajada fue del 25,6%.
En la Costa de la Luz, las ventas de coches en la provincia de Cádiz bajaron un 34%, mientras que en Huelva el descenso fue del 24% en julio.
En las costas catalanas, el descenso de matriculaciones más pronunciado fue el de Tarragona, con una caída de las ventas de automóviles del 31,9%, seguida de Barcelona y Girona, con unos descensos del 30 y 26%, respectivamente, en el mes de julio.
De esta forma, la patronal de los concesionarios explica que la caída de las ventas de automóviles no está afectando a todas las regiones por igual, sino que está castigando con mayor virulencia a aquellas provincias afectadas por la “crisis del ladrillo” donde el parón inmobiliario está conduciendo a múltiples despidos, así como a un frenazo del consumo.
Así, la caída media del 27,4% experimentada por las ventas de turismos y todoterrenos en el mes de julio tuvo su reflejo más acusado en aquellas provincias ubicadas en la costa mediterránea donde si bien la especulación inmobiliaria encontró su refugio más rentable en estos últimos años, el brusco ajuste del sector constructor está haciendo mayores estragos sobre la actividad económica.
Baleares, Castellón y Murcia, a la cabeza
De esta forma, las Islas Baleares, con 2.329 unidades matriculadas, es la comunidad autónoma que experimentó un mayor retroceso de las ventas en julio, con una caída del 53,7%, seguida de Castellón, con un descenso del 47,3% y 1.108 unidades matriculadas.
La Región de Murcia ocupa la tercera posición en caída de ventas, con una bajada del 43,5% y 2.619 vehículos vendidos, por delante de Valencia que, con un retroceso del 39,3%, se sitúa como la cuarta provincia con mayor caída. También en el arco mediterráneo, las provincias de Almería y Granada protagonizaron una bajada de las ventas del 37,5% y 36,9% en julio, ocupando así la quinta y sexta posición de este ranking, respectivamente.
Como excepción, la localidad de Alicante fue la única provincia española que experimentó un crecimiento de las ventas de automóviles durante el pasado mes de julio, con una subida del 15%. Asimismo, llama la atención igualmente el comportamiento de las ventas de coches en Málaga -escenario de la operación Malaya- donde cayeron un 18%, por debajo de la media nacional y del resto de provincias costeras analizadas. Otras costas
Por su parte, el Archipiélago Canario también registró uno de los descensos en ventas más acusados. Así, las matriculaciones de turismos y todoterrenos en Las Palmas cayeron un 35%, mientras que en Santa Cruz de Tenerife esta bajada fue del 25,6%.
En la Costa de la Luz, las ventas de coches en la provincia de Cádiz bajaron un 34%, mientras que en Huelva el descenso fue del 24% en julio.
En las costas catalanas, el descenso de matriculaciones más pronunciado fue el de Tarragona, con una caída de las ventas de automóviles del 31,9%, seguida de Barcelona y Girona, con unos descensos del 30 y 26%, respectivamente, en el mes de julio.