La Asociación de Talleres de Burgos, Adeabur, presentó el pasado viernes ante los medios de comunicación de la provincia su campaña "No te dejes manipular", que cuenta con la colaboración de la Cámara de Comercio y de la Unión de Consumidores de Burgos- UCE.Un personaje de comic, basado en la conocida figura de los maniquíes usados en los ensayos de seguridad de los automóviles (dummy´s), es la mascota adoptada por Adeabur para pilotar la acción promocional: "Con unos cordiales rasgos humanos, pretende personificar de forma figurada la capacidad y vocación técnica de los profesionales del motor, su vertiente mecánica y su directo conocimiento de los resultados de un accidente, que diariamente vive en primera persona por su trabajo (como de alguna manera también los vive el taller)", indican fuentes de la asociación burgalesa.
Tanto en el folleto, de formato tríptico como en los carteles de apoyo de la campaña, en los que se apoya la campaña se intenta llamar la atención del usuario del automóvil con consejos sencillos y prácticos relativos a su seguridad y a sus intereses como propietario de un automóvil. "Básicamente se recomienda seguir de cerca e implicarse tanto en el proceso de reparación de su vehículo como en la tramitación de su siniestro por la aseguradora. Y hace una llamada al conductor a la defensa de sus derechos, advirtiéndole que no deje que se le manipule", añaden las mismas fuentes.
En su intervención ante los medios de comunicación, el presidente de Adeabur, Juan Manuel Urién explicó la razones y conclusiones que han impulsado a Adeabur a acometer la campaña: "Las empresas de reparación de automóviles somos responsables directos del buen mantenimiento y reparación de los vehículos de nuestros clientes, y consecuentemente, de su seguridad, que es nuestra prioridad. Nuestra relación e implicación en sus problemas e intereses es, pues, muy estrecha. Por ello venimos asistiendo con preocupación a una escalada de abusos hacia nuestros clientes por parte de un sector de las aseguradoras, abusos a los que no son ajenas ni siquiera entidades que se cuentan entre las de mayor prestigio y cartera en el mercado".
Urién acusó a las compañías de imponer servicios de reparación "que le son desconocidos, que no son los que desea expresamente, o que evidencian mala calidad en la prestación; de recargar en las pólizas en casos de no atender a las imposiciones de la aseguradora; así como de pagar indemnizaciones cuyo montante no alcanza el coste real de una reparación solvente y de calidad. También criticó la obligación de abonar por el cliente parte del importe de la reparación si no acude a talleres concertados o los retrasos en la prestación de servicios. Ante nuestras denuncias el sector asegurador se defiende con frecuencia criticando el presunto nivel y calidad de nuestros servicios y su profesionalidad. Todo con la única intención de eludir la denuncia de sus faltas y desviar la atención en otra dirección. Curiosamente, estudios elaborados por organizaciones afines al sector asegurador afirman claramente que más del 90% de los usuarios de los servicios de reparación que prestan nuestras empresas están suficiente o notablemente satisfechos de la calidad de los mismos".
"Animaremos expresamente a nuestros clientes a que defiendan estos derechos, recordándoles que las asociaciones de consumidores, las OMIC y la administración regional y nacional están a su lado para ayudarle", resumió Urién . Por su parte Enrique Guerrero, abogado y portavoz de UCE-Burgos coincidió con buena parte de las conclusiones de Adeabur. "Del seguimiento de las consultas atendidas por los servicios jurídicos se desprende que el intentar, por medios cuando menos censurables, que el cliente opte por talleres distintos de los elegidos por él en principio es una práctica bastante habitual. También el retraso en la puesta a disposición de la indemnización de los perjudicados en accidentes. Preocupa a esta asociación de consumidores de forma significativa la aplicación de siniestros totales por cuantías con frecuencia alejadas del valor objetivo del bien, evitando numerosas reparaciones que pudieran ser viables. Así como impedir la libre elección de letrado que defienda los intereses del usuario la nula o la equívoca o nula información sobre la posibilidad de obtener éste un informe pericial contradictorio o dirimente". UCE-Burgos se ha ofrecido a asesorar en primera instancia a cuantos usuarios se sientan afectados en sus derechos legítimos por la actuación de aseguradoras.
Tanto en el folleto, de formato tríptico como en los carteles de apoyo de la campaña, en los que se apoya la campaña se intenta llamar la atención del usuario del automóvil con consejos sencillos y prácticos relativos a su seguridad y a sus intereses como propietario de un automóvil. "Básicamente se recomienda seguir de cerca e implicarse tanto en el proceso de reparación de su vehículo como en la tramitación de su siniestro por la aseguradora. Y hace una llamada al conductor a la defensa de sus derechos, advirtiéndole que no deje que se le manipule", añaden las mismas fuentes.
En su intervención ante los medios de comunicación, el presidente de Adeabur, Juan Manuel Urién explicó la razones y conclusiones que han impulsado a Adeabur a acometer la campaña: "Las empresas de reparación de automóviles somos responsables directos del buen mantenimiento y reparación de los vehículos de nuestros clientes, y consecuentemente, de su seguridad, que es nuestra prioridad. Nuestra relación e implicación en sus problemas e intereses es, pues, muy estrecha. Por ello venimos asistiendo con preocupación a una escalada de abusos hacia nuestros clientes por parte de un sector de las aseguradoras, abusos a los que no son ajenas ni siquiera entidades que se cuentan entre las de mayor prestigio y cartera en el mercado".
Urién acusó a las compañías de imponer servicios de reparación "que le son desconocidos, que no son los que desea expresamente, o que evidencian mala calidad en la prestación; de recargar en las pólizas en casos de no atender a las imposiciones de la aseguradora; así como de pagar indemnizaciones cuyo montante no alcanza el coste real de una reparación solvente y de calidad. También criticó la obligación de abonar por el cliente parte del importe de la reparación si no acude a talleres concertados o los retrasos en la prestación de servicios. Ante nuestras denuncias el sector asegurador se defiende con frecuencia criticando el presunto nivel y calidad de nuestros servicios y su profesionalidad. Todo con la única intención de eludir la denuncia de sus faltas y desviar la atención en otra dirección. Curiosamente, estudios elaborados por organizaciones afines al sector asegurador afirman claramente que más del 90% de los usuarios de los servicios de reparación que prestan nuestras empresas están suficiente o notablemente satisfechos de la calidad de los mismos".
"Animaremos expresamente a nuestros clientes a que defiendan estos derechos, recordándoles que las asociaciones de consumidores, las OMIC y la administración regional y nacional están a su lado para ayudarle", resumió Urién . Por su parte Enrique Guerrero, abogado y portavoz de UCE-Burgos coincidió con buena parte de las conclusiones de Adeabur. "Del seguimiento de las consultas atendidas por los servicios jurídicos se desprende que el intentar, por medios cuando menos censurables, que el cliente opte por talleres distintos de los elegidos por él en principio es una práctica bastante habitual. También el retraso en la puesta a disposición de la indemnización de los perjudicados en accidentes. Preocupa a esta asociación de consumidores de forma significativa la aplicación de siniestros totales por cuantías con frecuencia alejadas del valor objetivo del bien, evitando numerosas reparaciones que pudieran ser viables. Así como impedir la libre elección de letrado que defienda los intereses del usuario la nula o la equívoca o nula información sobre la posibilidad de obtener éste un informe pericial contradictorio o dirimente". UCE-Burgos se ha ofrecido a asesorar en primera instancia a cuantos usuarios se sientan afectados en sus derechos legítimos por la actuación de aseguradoras.