Presentado en el Salón de Frankfurt, el nuevo IQ de Toyota representa un cambio paradigmático en el diseño de los automóviles pequeños, un vehículo que desafía al pensamiento tradicional de la automoción: pequeño si, pero espacioso y de primera calidad. Realizado a través de la visión de un vehículo ultra-compacto, altamente eficaz en cuanto al espacio, favorable para el medio ambiente, que maximiza el estilo de vida urbano de los moradores metropolitanos de Europa.
Este “concept” ha sido creado en el ED2, el estudio de diseño avanzado europeo de Toyota, en el sur de Francia, trabajando bajo la filosofía de diseño “Vibrant Clarity” de Toyota. Un diseño que se percibe, inteligente y enérgico pero que, a su vez, conserva la claridad de los fines y la función.
Tan solo un palmo más corto que los tres metros de longitud, 2,98 metros para ser preciso, supone un planteamiento nuevo y radical en cuanto al diseño y equipamiento de vehículos. Desafía las limitaciones actuales del transporte urbano ultra-compacto al ofrecer un interior capaz de dar asiento a cuatro adultos o a tres adultos y un espacio para el equipaje. Una versatilidad única con una huella mínima.
La expresión de la estructura y de la construcción del vehículo resulta vital para mantener un diseño simple, aunque al mismo tiempo enérgico, sirviendo asimismo para expresar, de manera clara, el concepto del coche. La estructura alrededor de unos neumáticos de 17 pulgadas forma parte de unos voladizos delantero y trasero mínimos, una sinergia que transmite resistencia y agilidad.
En el interior, la estructura geométrica básica del panel de instrumentos crea un ambiente amplio y abierto. La consola central, tipo manta-raya, es una estructura que abarca los instrumentos para crear un punto de enfoque claro e intenso. Las salidas de ventilación del aire acondicionado presentan una construcción cilíndrica, relacionada claramente con su función. La impresión global es la de unos componentes en armonía formando una nueva expresión emocional.
El IQ nace para ser, y lo hace con éxito, el “concept-car” de cuatro plazas premium más pequeño del mundo. Con menos de tres metros de longitud (2.980 mm.), resulta 420 mm. más corto que el Toyota Aygo y más de 770 mm. más corto que el Toyota Yaris. En cuanto a la anchura y la altura (1.680 mm. x 1.480 mm.), resulta comparable con el Yaris. Sus ultra-compactas dimensiones exteriores ocultan un gran corazón interior.
Al mismo tiempo, el IQ resulta versátil y práctico. Puede dar acomodo a cuatro asientos con espacio para tres adultos y un niño, o el cuarto asiento puede utilizarse como espacio para el equipaje. Para conseguir esto, se ha aplicado un concepto radical e inteligente de 3 + 1 asientos. Gracias al salpicadero que se separa bruscamente del acompañante, se le ha dado a este asiento una libertad de movimientos extra.
Durante el uso normal, el conductor y el acompañante se sientan uno al lado del otro. Pero, para acomodar a un tercer adulto o a un adulto y un niño, el asiento del acompañante puede desplazarse hacia una posición más adelantada, lo que permite un mayor espacio y un acceso más fácil a la parte trasera. El asiento trasero se caracteriza por una partición flexible 60/40 que se puede adaptar para dar asiento a un adulto y a un niño, un adulto y espacio para el equipaje o un espacio completo para el equipaje.
La instrumentación se asienta por encima del salpicadero principal, oscuro y misterioso con la caída y las curvas de una manta-raya; su parte trasera brilla con un embellecedor cromado en color plata a medida que desciende para formar la consola central con un estilo claramente definido. Un solo dial central proporciona el control del ambiente interior, con la temperatura y la ventilación representadas en el panel central, situado claramente en la línea de visión del conductor.
La representación tridimensional 3 en 1 de la velocidad, las rpm del motor y el aforador de combustible, va montada por encima de la columna de la dirección, mientras que los controles de las funciones de los sistemas de sonido y de navegación se encuentran en el propio volante de la dirección. Con una solución inteligente de alta tecnología para la navegación urbana, se coloca una pantalla solitaria del GPS dentro de la línea de visión del conductor, aunque se puede ver a su través cuado está desactivada.
Un techo solar panorámico de cristal garantiza la plenitud de luz y les aporta a los pasajeros la sensación de que no se encuentran confinados dentro de un compartimento convencional. Por la noche, su oscuro interior resulta misterioso, enfatizando aun más la sensación de modernidad del IQ.
Este “concept” ha sido creado en el ED2, el estudio de diseño avanzado europeo de Toyota, en el sur de Francia, trabajando bajo la filosofía de diseño “Vibrant Clarity” de Toyota. Un diseño que se percibe, inteligente y enérgico pero que, a su vez, conserva la claridad de los fines y la función.
Tan solo un palmo más corto que los tres metros de longitud, 2,98 metros para ser preciso, supone un planteamiento nuevo y radical en cuanto al diseño y equipamiento de vehículos. Desafía las limitaciones actuales del transporte urbano ultra-compacto al ofrecer un interior capaz de dar asiento a cuatro adultos o a tres adultos y un espacio para el equipaje. Una versatilidad única con una huella mínima.
La expresión de la estructura y de la construcción del vehículo resulta vital para mantener un diseño simple, aunque al mismo tiempo enérgico, sirviendo asimismo para expresar, de manera clara, el concepto del coche. La estructura alrededor de unos neumáticos de 17 pulgadas forma parte de unos voladizos delantero y trasero mínimos, una sinergia que transmite resistencia y agilidad.
En el interior, la estructura geométrica básica del panel de instrumentos crea un ambiente amplio y abierto. La consola central, tipo manta-raya, es una estructura que abarca los instrumentos para crear un punto de enfoque claro e intenso. Las salidas de ventilación del aire acondicionado presentan una construcción cilíndrica, relacionada claramente con su función. La impresión global es la de unos componentes en armonía formando una nueva expresión emocional.
El IQ nace para ser, y lo hace con éxito, el “concept-car” de cuatro plazas premium más pequeño del mundo. Con menos de tres metros de longitud (2.980 mm.), resulta 420 mm. más corto que el Toyota Aygo y más de 770 mm. más corto que el Toyota Yaris. En cuanto a la anchura y la altura (1.680 mm. x 1.480 mm.), resulta comparable con el Yaris. Sus ultra-compactas dimensiones exteriores ocultan un gran corazón interior.
Al mismo tiempo, el IQ resulta versátil y práctico. Puede dar acomodo a cuatro asientos con espacio para tres adultos y un niño, o el cuarto asiento puede utilizarse como espacio para el equipaje. Para conseguir esto, se ha aplicado un concepto radical e inteligente de 3 + 1 asientos. Gracias al salpicadero que se separa bruscamente del acompañante, se le ha dado a este asiento una libertad de movimientos extra.
Durante el uso normal, el conductor y el acompañante se sientan uno al lado del otro. Pero, para acomodar a un tercer adulto o a un adulto y un niño, el asiento del acompañante puede desplazarse hacia una posición más adelantada, lo que permite un mayor espacio y un acceso más fácil a la parte trasera. El asiento trasero se caracteriza por una partición flexible 60/40 que se puede adaptar para dar asiento a un adulto y a un niño, un adulto y espacio para el equipaje o un espacio completo para el equipaje.
La instrumentación se asienta por encima del salpicadero principal, oscuro y misterioso con la caída y las curvas de una manta-raya; su parte trasera brilla con un embellecedor cromado en color plata a medida que desciende para formar la consola central con un estilo claramente definido. Un solo dial central proporciona el control del ambiente interior, con la temperatura y la ventilación representadas en el panel central, situado claramente en la línea de visión del conductor.
La representación tridimensional 3 en 1 de la velocidad, las rpm del motor y el aforador de combustible, va montada por encima de la columna de la dirección, mientras que los controles de las funciones de los sistemas de sonido y de navegación se encuentran en el propio volante de la dirección. Con una solución inteligente de alta tecnología para la navegación urbana, se coloca una pantalla solitaria del GPS dentro de la línea de visión del conductor, aunque se puede ver a su través cuado está desactivada.
Un techo solar panorámico de cristal garantiza la plenitud de luz y les aporta a los pasajeros la sensación de que no se encuentran confinados dentro de un compartimento convencional. Por la noche, su oscuro interior resulta misterioso, enfatizando aun más la sensación de modernidad del IQ.