Durante los meses de julio y agosto, en las carreteras españolas, se han producido un total de 465 accidentes mortales, en los que han fallecido 540 personas, 239 han resultado heridas graves y 260 heridas leves, según los datos de la DGT presentados ayer por el Ministro del Interior.
Estos datos representan un aumento de 12 muertos (+8%), con respecto al verano del pasado año. Sin embargo, este año las víctimas en las carreteras se han reducido un 36,5% con respecto al verano de 2003, en el que se registraron 852 muertos.
Tanto en julio como en agosto se ha registrado el mismo número de fallecidos: 270. Respecto a 2006, en julio se registró un descenso del 3% (8 fallecidos menos) mientras que agosto se cerró con un incremento del 8% (20 fallecidos más). Este aumento se explica por la elevada siniestralidad en la primera quincena del mes.
En el cómputo anual, durante los primeros ocho meses, entre enero y agosto, se constata un descenso en el número de víctimas: se han registrado 198 muertos menos que en el mismo periodo de 2006, lo que representa un descenso del 9,76%.
Las cifras obtenidas de la accidentalidad de los últimos 10 veranos permiten observar que a partir del año 2004 se inicia un descenso en el número de accidentes y víctimas mortales en carretera.
Este descenso es muy pronunciado en 2004, 17% de víctimas mortales menos que en 2003, y en 2006, 21% de víctimas mortales menos que en 2005. El verano de 2007 presenta una cifra de muertos superior en un 2,27% a la de 2006.
Si durante la primera quincena de agosto de este año, tanto los accidentes como las víctimas en carretera aumentaron, en la segunda quincena del mismo mes, la siniestralidad disminuyó un 8% en los accidentes mortales y un 9% en los fallecidos.
El promedio diario de víctimas mortales en accidente durante el verano, para el periodo 2003 a 2007, ha descendido de 13,7 a 8,7, es decir se registran 5 muertos diarios menos que en 2003.
Por meses, en julio el promedio diario de muertos ha pasado de 12,5 en 2003 a 8,7 en 2007, 4 muertos diarios menos y en el mes de agosto de 15,0 a 8,7, lo que supone 6 muertos diarios menos.
Estos datos representan un aumento de 12 muertos (+8%), con respecto al verano del pasado año. Sin embargo, este año las víctimas en las carreteras se han reducido un 36,5% con respecto al verano de 2003, en el que se registraron 852 muertos.
Tanto en julio como en agosto se ha registrado el mismo número de fallecidos: 270. Respecto a 2006, en julio se registró un descenso del 3% (8 fallecidos menos) mientras que agosto se cerró con un incremento del 8% (20 fallecidos más). Este aumento se explica por la elevada siniestralidad en la primera quincena del mes.
En el cómputo anual, durante los primeros ocho meses, entre enero y agosto, se constata un descenso en el número de víctimas: se han registrado 198 muertos menos que en el mismo periodo de 2006, lo que representa un descenso del 9,76%.
Las cifras obtenidas de la accidentalidad de los últimos 10 veranos permiten observar que a partir del año 2004 se inicia un descenso en el número de accidentes y víctimas mortales en carretera.
Este descenso es muy pronunciado en 2004, 17% de víctimas mortales menos que en 2003, y en 2006, 21% de víctimas mortales menos que en 2005. El verano de 2007 presenta una cifra de muertos superior en un 2,27% a la de 2006.
Si durante la primera quincena de agosto de este año, tanto los accidentes como las víctimas en carretera aumentaron, en la segunda quincena del mismo mes, la siniestralidad disminuyó un 8% en los accidentes mortales y un 9% en los fallecidos.
El promedio diario de víctimas mortales en accidente durante el verano, para el periodo 2003 a 2007, ha descendido de 13,7 a 8,7, es decir se registran 5 muertos diarios menos que en 2003.
Por meses, en julio el promedio diario de muertos ha pasado de 12,5 en 2003 a 8,7 en 2007, 4 muertos diarios menos y en el mes de agosto de 15,0 a 8,7, lo que supone 6 muertos diarios menos.