La Comunidad de Madrid va a organizar cursos de conducción ecológica para conseguir reducir la emisión de gases contaminantes del vehículo privado hasta en un 15 por ciento.
El 80 por ciento de los madrileños está de acuerdo con que se prohíba el uso del coche en el centro de sus ciudades y a un 30 por ciento les parecería bien que los vehículos privados pagasen un peaje de entrada a la ciudad, según un estudio realizado por el RACC para la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid.
El Informe del RACC (Real Automóvil Club de Cataluña), que se basa en 1.008 encuestas realizadas en la región a personas con edades entre 16 y 70 años, refleja que los madrileños son conscientes de que "el tráfico de los vehículos es uno de los principales causantes de la contaminación atmosférica en Madrid".
Un 51,5 por ciento de los encuestados considera que la responsabilidad de los problemas ambientales en la Comunidad recae en la Administración y el mismo porcentaje estaría dispuesto a aumentar el precio que paga por un vehículo o el impuesto de circulación por solucionarlos, explicó Sebastián Salvadó, presidente del RACC.
Sobre cómo financiar el gasto en medio ambiente, un 12 por ciento piensa que ha de hacerse con los precios de las gasolinas. Por otra parte, la mejora del transporte público, el acondicionamiento de parques y jardines, la modernización de la red viaria y la creación de carriles bici deben de ser el principal destino de las inversiones ambientales, según opinan los encuestados, que creen que las acciones de movilidad debe dirigirse a ampliar los autobuses de gas natural, a educación ambiental y multar a los que más contaminan.
El consejero de Medio Ambiente, Mariano Zabía, destacó en la presentación del estudio que cinco de cada diez madrileños utilizan de forma habitual el transporte público, al que dan un aprobado alto (6,1 puntos), mientras que cuatro de cada diez hacen uso del privado, sobre todo, cuando salen por la noche.
El 65 por ciento se declara usuario del transporte público por razones de "comodidad, recorrido y horarios", aunque a la hora de desplazarse en sus vacaciones fuera de la región el 79,2 hace uso del coche.
Para que estos usuarios del vehículo privado conduzcan mejor y de manera más eficiente, la Consejería de Medio Ambiente, en colaboración con el RACC, pondrá en marcha 10.000 cursos gratuitos de conducción ecológica a partir de septiembre, con los que se pretenden reducir hasta en un 15 por ciento las emisiones de los coches.
Además, la Consejería prevé llevar a cabo estudios sobre la movilidad en diferentes municipios de la región, con el fin de recabar datos para hacerla más sostenible, como parte de las medidas del Plan Azul para la mejora de la calidad del aire.
El 80 por ciento de los madrileños está de acuerdo con que se prohíba el uso del coche en el centro de sus ciudades y a un 30 por ciento les parecería bien que los vehículos privados pagasen un peaje de entrada a la ciudad, según un estudio realizado por el RACC para la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid.
El Informe del RACC (Real Automóvil Club de Cataluña), que se basa en 1.008 encuestas realizadas en la región a personas con edades entre 16 y 70 años, refleja que los madrileños son conscientes de que "el tráfico de los vehículos es uno de los principales causantes de la contaminación atmosférica en Madrid".
Un 51,5 por ciento de los encuestados considera que la responsabilidad de los problemas ambientales en la Comunidad recae en la Administración y el mismo porcentaje estaría dispuesto a aumentar el precio que paga por un vehículo o el impuesto de circulación por solucionarlos, explicó Sebastián Salvadó, presidente del RACC.
Sobre cómo financiar el gasto en medio ambiente, un 12 por ciento piensa que ha de hacerse con los precios de las gasolinas. Por otra parte, la mejora del transporte público, el acondicionamiento de parques y jardines, la modernización de la red viaria y la creación de carriles bici deben de ser el principal destino de las inversiones ambientales, según opinan los encuestados, que creen que las acciones de movilidad debe dirigirse a ampliar los autobuses de gas natural, a educación ambiental y multar a los que más contaminan.
El consejero de Medio Ambiente, Mariano Zabía, destacó en la presentación del estudio que cinco de cada diez madrileños utilizan de forma habitual el transporte público, al que dan un aprobado alto (6,1 puntos), mientras que cuatro de cada diez hacen uso del privado, sobre todo, cuando salen por la noche.
El 65 por ciento se declara usuario del transporte público por razones de "comodidad, recorrido y horarios", aunque a la hora de desplazarse en sus vacaciones fuera de la región el 79,2 hace uso del coche.
Para que estos usuarios del vehículo privado conduzcan mejor y de manera más eficiente, la Consejería de Medio Ambiente, en colaboración con el RACC, pondrá en marcha 10.000 cursos gratuitos de conducción ecológica a partir de septiembre, con los que se pretenden reducir hasta en un 15 por ciento las emisiones de los coches.
Además, la Consejería prevé llevar a cabo estudios sobre la movilidad en diferentes municipios de la región, con el fin de recabar datos para hacerla más sostenible, como parte de las medidas del Plan Azul para la mejora de la calidad del aire.