En la carrera este coche deberá competir con otros 250 coches de gasolina. Y como ellos deberá repostar por el camino, sólo que, en su caso, debido a la escasez de surtidores de aceite en el trayecto tendrá que surtirse de lo que recoja de restaurantes y supermercados que ya han sido previamente contactados. Una vez obtenido, el aceite debe ser tratado por un simple proceso de filtrado para evitar que contenga cuerpos extraños.
El reto ha sido bautizado como EcoChallenge y será parte de un documental producido por KanZaman, que tratará de demostrar, con los cálculos de los litros de aceite consumidos en el rally y la opinión de diversos expertos, la conveniencia de utilizar los biocarburantes. “Creemos que los biocombustibles son una solución real y asequible para frenar la emisión de gases contaminantes a la atmósfera por parte del sector transporte además de contribuir al desarrollo socioeconómico que hoy en día es altamente dependiente del petróleo”, asegura el equipo de EcoChallenge. “Esperamos que este documental arroje luz sobre la realidad estas tecnologías, que hoy en día se ven ensombrecidas con dudas infundadas. También esperamos satisfacer nuestra necesidad personal de vivir una verdadera aventura en un mundo que todavía la ofrece a aquellos que la buscan con ahínco”.
El Mongol rally es una carrera benéfica que parte desde Madrid y finaliza en Ulan Bator, capital de Mongolia. El rally comenzará el día 20 de julio y tiene una duración aproximada de un mes. La normativa de este rally obliga a sus participantes a competir en coches de bajas prestaciones o en un coche que se pueda considerar original. Todo el dinero recaudado por el rally con la inscripción de sus participantes es donado a asociaciones benéficas de Mongolia. Este rally nació hace 3 años con la participación de 6 coches, aunque el número de participantes ha crecido exponencialmente y el año pasado compitieron 147 coches. Este año la organización ha limitado el rally a 250 participantes, número que esperan copar.