Continental, uno de los cinco principales proveedores mundiales de automoción, lanzará una nueva generación de sistemas electrónicos de frenos en 2011. Se trata del sistema MK100 que permite instalar dispositivos ABS/ESC en toda clase de vehículos, y proporciona un importante ahorro de espacio y tiempo en su instalación.
El MK100 estará basado en una gama modular de productos, con lo que sus funciones pueden aumentar para adecuarse a cualquier necesidad y nivel de prestaciones requeridos. Un paquete completo de funciones autónomas para estabilizar el vehículo puede ser integrado en este sistema, como la Protección Antivuelco; el Asistente de Arranque en Cuesta, y el Control de Crucero Adaptativo para todas las velocidades.
Debido a su estructura modular, el MK100 admite adaptaciones a futuros desarrollos y puede integrarse a la perfección en el sistema ContiGuard®. Esto supondría la interrelación de todos los sistemas de seguridad pasiva y activa para incrementar aún más la seguridad de los ocupantes del vehículo gracias al uso de medidas preventivas.
El MK100 también facilita que su revisión sea mucho más sencilla, debido a que el sistema de frenos está monitorizado electrónicamente de manera constante. De este modo se añade solidez al sistema, aumentando la seguridad del cliente y reduciendo los costes de las revisiones y el tiempo de estancia en el taller.
El MK100 representa una nueva era respecto al espacio y peso. Su tamaño se ha reducido un 20% en comparación con la actual generación de sistemas de frenos. Además, los ingenieros de Continental han sido capaces de reducir el peso del MK100 en la misma proporción.
El MK100 reemplazará gradualmente los actuales modelos de sistemas de frenos de Continental. La fecha de inicio de fabricación en serie de la nueva plataforma MK100 se ha fijado para la primera mitad de 2011. Como activo proveedor internacional de automoción, Continental será capaz de fabricar el MK100 en todas sus factorías de todo el mundo.
El MK100 estará basado en una gama modular de productos, con lo que sus funciones pueden aumentar para adecuarse a cualquier necesidad y nivel de prestaciones requeridos. Un paquete completo de funciones autónomas para estabilizar el vehículo puede ser integrado en este sistema, como la Protección Antivuelco; el Asistente de Arranque en Cuesta, y el Control de Crucero Adaptativo para todas las velocidades.
Debido a su estructura modular, el MK100 admite adaptaciones a futuros desarrollos y puede integrarse a la perfección en el sistema ContiGuard®. Esto supondría la interrelación de todos los sistemas de seguridad pasiva y activa para incrementar aún más la seguridad de los ocupantes del vehículo gracias al uso de medidas preventivas.
El MK100 también facilita que su revisión sea mucho más sencilla, debido a que el sistema de frenos está monitorizado electrónicamente de manera constante. De este modo se añade solidez al sistema, aumentando la seguridad del cliente y reduciendo los costes de las revisiones y el tiempo de estancia en el taller.
El MK100 representa una nueva era respecto al espacio y peso. Su tamaño se ha reducido un 20% en comparación con la actual generación de sistemas de frenos. Además, los ingenieros de Continental han sido capaces de reducir el peso del MK100 en la misma proporción.
El MK100 reemplazará gradualmente los actuales modelos de sistemas de frenos de Continental. La fecha de inicio de fabricación en serie de la nueva plataforma MK100 se ha fijado para la primera mitad de 2011. Como activo proveedor internacional de automoción, Continental será capaz de fabricar el MK100 en todas sus factorías de todo el mundo.
