Después de explicar con todo lujo de detalles la diferencia entre garantía legal y comercial, y las novedades introducidas por la Ley de Garantías en lo que concierne a los vehículos y sus piezas, la revista se detiene en analiza los motivos que pueden producir pérdida de la garantía de un automóvil nuevo. "El principal motivo es que el automóvil sea intervenido en un concesionario (sic) ajeno a la marca. Si durante el periodo de garantía se repara el vehículo en otro concesionario, cuando de nuevo se lleve al taller de la marca, si en éste detectan que tiene una pieza que no es original o que el coche ha sido manipulado, no tiene obligación de arreglarlo. Se considera que esa avería está fuera de garantía y, por lo tanto, el taller no es responsable porque el vehículo ha sido tocado por un establecimiento ajeno".
En este sentido, el artículo de Consumer recuerda que la Comisión Europea señala en la pregunta número 37 de la Guía Explicativa del Reglamento 1400/2002, de Distribución de Vehículos en Europa, que "si el consumidor acude a un taller independiente para realizar reparaciones o tareas de mantenimiento de su coche durante el período de garantía del fabricante, puede perder la garantía si el trabajo es defectuoso".
El documento que Consumer presenta a sus lectores añade que Bruselas "reconoce una obligación de realizar las reparaciones y el mantenimiento de un vehículo sólo en la red autorizada 'vulneraría el derecho del consumidor a elegir un taller independiente' e impediría, sobre todo en el caso de las garantías ampliadas, que esos talleres de reparación "compitieran de forma efectiva con la red autorizada".
